miércoles, 25 de enero de 2017

Hermanos rojiblancos

 
Los seis de Los50 desplazados a San Mamés.

Athletic 2 - Atleti 2

"Habéis venido de Madrid? Pues buen regreso. El partido, bonito, no? Y el empate justo" Todo dicho con el inconfundible acento de Vizcaya. Era el resumen que hacía un orondo y vasco seguidor del Athletic Club después de aplaudir a los jugadores y antes de darme la mano en un gesto espontáneo de hermandad rojiblanca y rivalidad futbolística en la grada de San Mamés.

El partido se nos puso de cara muy pronto con el tempranero gol de Koke que pareció de Griezmann. Pero el equipo sesteó durante 30 minutos pensando que enfrente estaba el Betis y haciendo como que no se daban cuenta de que jugábamos en el maravilloso estadio de San Mamés. El Athletic se percató de la situación y fue adueñándose del partido por la incomparecencia de los nuestros. Hasta tal punto que, en un ataque intrascendente, Filipe se hace daño, se queda cojeando y, cuando arranca para molestar el disparo de Lekue ya era demasiado tarde. Gol. Fin de la primera parte. Un tiro a puerta en cada portería y empate a uno. El nuestro nada más comenzar y el de ellos a punto de terminar.

La segunda parte fue todo intensidad. Comenzó el Athletic muy serio y al Atleti de le veía con posibilidades de remontar. Un fallo en la salida de balón con Godín tratando de echarse el equipo a la espalda hace que Raúl García ponga un balón en el hueco dejado por el uruguayo para que De Marcos remate rodeado de defensas que esperan a Godín como quien espera el 18. Gol. 2-1. Los leones, sin Beñat y sin Aduriz, nos acababan de remontar. El Cholo mueve rápidamente el banquillo y saca primero a Torres por un Gabi amonestado. Al poco, cambio doble,  Gaitán y Correa por un Gameiro al que se le acaba el crédito (aunque le sobra el esfuerzo) y un Carrasco que juega pensando más en su lucimiento particular que en sumar para el equipo. Parecía que los Cholocambios no iban a funcionar pero... Griezmann mete un golazo y se lo anulan por fuera de juego. En el campo pareció más que dudoso, en la repetición no. Gol legal (ay el ojo de halcón, ay el videoarbitraje) Ahí empezamos a apretar. Un crío del Atleti que había venido con su padre y se sentaba dos filas más arriba gritaba sin parar: "presionad más, que acabáis de salir". Y parece que Correa, Gaitán y Torres le escucharon. El de Fuenlabrada recupera un balón, se la pasa al francés y el zurriagazo es tan genial que los seis de Los50, a pesar de haber hecho propósito de moderación, nos levantamos como un resorte y explotamos en gol. Abrazos, celebración y los de La Txapela de Neptuno, (presentes en la zona acristalada de la afición visitante) vuelven a la carga con los cánticos otra vez: "Atleeeeeti, Atleeeeeeti, Atleeeeeti". Estos valientes no dejaron de animar a los nuestros con el consiguiente enfado y respuesta de la afición local. Eran 20 gargantas vizcaínas del Glorioso contra 45.000 del Athletic. Se les oía a los del txoko de Sarriko. Y mucho. 

Valverde se temió lo peor y nosotros deseábamos lo mejor. Hizo un cambio para perder tiempo y el partido terminó. Si llega a durar cinco minutos más nos traemos los tres puntos. Aún así, seguimos sin perder en el nuevo San Mamés, un campo espectacular con una afición ejemplar. Nos traemos un montón de amigos, una experiencia increíble compartiendo mesa y cánticos con nuestros hermanos de La Txapela en su sede (gente increíble), una previa con otros miembros de Los50 y allegados que fueron con la familia (Javi, Carlos Treviño, Rubén Amón...), el ratito de risas con los de Cuatro, los zuritos, un chuletón a la carrera y las confidencias durante el viaje, entre surtido de chistes y regalos flamencos de piel de gallina. Ser del Atleti, es lo que tiene. 

Ya tengo localizada en Jaén la Peña "Los colchoneros" en la Taberna Pepón. A ver si acabo a tiempo para ver a los nuestros contra el Eibar. Ojalá la Copa. Ojalá en el Calderón. Ganarla sería el mejor colofón.

Aúpa Atleti. Siempre.

viernes, 20 de enero de 2017

El Atleti no juega a nada y otros efectos colaterales


Atleti 3 - Eibar 0

Ayer publicaban el informe de ingresos económicos, en millones de euros, de los clubes europeos durante la pasada temporada. El Atleti ha subido dos puestos: del 15 al 13. Supongo que algo tendrá que ver el hecho de haber disputado la Champions desde que llegó el Cholo, haber llegado a dos finales, haber ganado una Europa League, una supercopa de Europa, una Copa, una supercopa de España y hasta una Liga en la competición donde juegan las dos selecciones mundiales. Estos éxitos deportivos tienen aparejados, a su vez, dos efectos colaterales que sufrimos los que llevamos el escudo por dentro, los enfermos de las rayas canallas de los colchones, los indios sin remedio.

El efecto colateral más visible es el de los medios. Molestamos, ya lo dijo el míster. Y eso se nota en cómo se refieren a nuestro equipo. Al principio éramos ultradefensivos y aburridos, después éramos muy violentos (curioso que el Atleti sea el equipo que menos faltas ha cometido en lo que llevamos de Champions y uno de los que menos en Liga), luego no sabíamos jugar bonito (que explícame tú lo que es jugar bonito o feo). Ahora es que el Atleti no juega a nada. En fin. Aún así, ahí seguimos, en la pomada.

El segundo efecto colateral viene aparejado al que acabamos de mencionar sucintamente en el párrafo anterior, a la basura a la que resulta casi imposible sustraerse a pesar de la advertencia de nuestro entrenador para que no consumamos. Este segundo efecto no es otro que las nuevas huestes de aficionados que se han apuntado al éxito rojiblanco, que buscan lo que nunca hemos sido y que pretenden hacernos creer lo que vomitan los cuatro bufones pesebreros que ladran envueltos en sus bufandas participando en espectáculos más o menos bochornosos a través de la tele o la radio. Pero es que algunos de estos payasos titulados en periodismo que escriben en webs y diarios inoculan sus absurdas teorías sobre el Atleti a los que se han apuntado ahora a venir al campo. Y se escucha cada cosa en la grada... que ahora me explico las peleas entre aficionados el día que el Madrid de Zidane nos volvió a ganar en nuestro campo.

Ayer dijeron que el Atleti volvió a jugar a nada. Y los comentaristas, y los listos de las teles y las radios, se pasaron el día hablando de la segura remontada de una de las selecciones mundiales que la víspera había caído derrotada en su casa y de la impresionante victoria de la otra selección mundial en un campo donde era imposible ganar ante un equipo todopoderoso como la Real Sociedad. Del Atleti sólo eso, que no había jugado a nada, que no dan dos pases seguidos, que el Eibar es un rival débil y sin presupuesto, que vinieron con los reservas, que están pendientes de recibir a una de las dos selecciones mundiales en Liga para pedirles las camisetas a sus ídolos y que la Copa no tenía ningún mínimo interés para ellos. Que el Atleti no podía no ganar. Para vomitar.

Lo cierto y verdad es que ayer el Cholo sacó un equipo distinto con Carrasco y Gaitán en los extremos, con Correa y Griezmann en punta. Y que cuando Gameiro entró en la segunda mitad, volvió a encontrar puerta y ya son 8 goles los que lleva el segundo francés (6 en Liga, 1 en Champions y 1 en Copa) al que algunos de los colaterales silban y algunos de los de siempre tardan en darle credibilidad. Y aún estamos a mitad de temporada. Yo confío en él. Y en Griezmann que volvió a marcar (13 lleva ya el primer francés) como Correa, que estuvo atento al rechace.
Bien el equipo. Sin alardes innecesarios y con una seriedad notable en defensa. Un partido serio y muy del Atleti. De los que no gustan a los del efecto del efecto colateral. De los imprescindibles para -partido a partido, eliminatoria a eliminatoria- poder llegar a otra final.

Y ahora a pensar en Liga, en Bilbao, en que no nos la líe Raúl García en un estadio siempre complicado, contra el equipo de nuestros orígenes. Y nuestro Atleti no estará solo. Infiltrados en la grada del nuevo San Mamés estarán los miembros de la única peña atlética de Vizcaya, 'La txapela de Neptuno' a los que la SAD no ha tenido a bien facilitarles la venta de entradas (nuestro club las rechazó bajo el pretexto de no haber tenido demanda). Y además de los 20 valientes vizcaínos del Atleti, media docena de Los50 que, a título personal, verán in situ el encuentro desafiando las distancias, la nieve y con la esperanza de regresar con tres puntos importantes para cerrar con broche de Champions la primera vuelta de una Liga aún por decidir.

Aúpa Atleti.


domingo, 15 de enero de 2017

Las llaves de la moto

 
El beticismo se despidió del Vicente Calderón con un desplazamiento masivo y una pancarta en la que recordaban las dos Copas del Rey que ganaron aquí.

Atleti 1 - Betis 0

Me pasa como al Atleti. Vivo tan confiado, tan relajado, tan me da igual lo que digan, que ayer me dejé las llaves de la moto puestas. Aparqué junto al bar de la previa, tomamos café, copa y otra copa. Y cuando nos dirigíamos al campo para brindar con la lata de cerveza en las colas artificiales que se montan en los tornos de un par de temporadas a esta parte... ¡zas! Me doy cuenta de que no tengo las llaves de la moto, que me las he dejado puestas. Carrera hacia atrás y, para mi sorpresa, en su lugar encuentro una nota escrita con muy buena letra: "tengo tus llaves. Llámame. Este es mi teléfono". Dicho y hecho. Al otro lado del móvil me cuenta que las tiene él y que va conduciendo, que me pasa con su mujer. Luego supe que se llamaban León y Eva. Y quedamos en que después del partido nos veíamos y me las devolvían. Me fui al Calderón intentando no pensar en las llaves y en lo desastroso que soy. En que un día me voy a olvidar la cabeza. En que tenía que disfrutar del partido, que ya no podía hacer más. Que la suerte estaba echada.

El partido fue lo mismo. Un Atleti que marcó muy pronto gracias a un rebote que enganchó Gaitán. Y se acabó. Estaba confiado, como si ya hubiera hecho todo lo que tenía que hacer. Disimulando los nervios sobre el césped ante un posible gol de Rubén Castro o de Ceballos o de cualquier verdiblanco que se creyera capaz de empatar y hasta de ganar al Atleti en su última visita al Vicente Calderón. Y los nervios se trasladaron a la grada. Estaba lleno pero había un ambiente raro. Quizá por los cinco últimos minutos contra Las Palmas en Copa, quizá porque algunos estaban más pendientes de la llaves de la moto, de querer ver lo que consumen, de pitar en lugar de animar, de creerse lo que nunca hemos sido, lo que no somos ni queremos ser. Y el Cholo en la banda se volvía loco gritando a los chicos y pidiendo a la grada que ejerciera de afición rojiblanca sin mucho éxito. 

Ganamos. Y van tres partidos seguidos en Liga. Nueve de nueve. Primera victoria de 2017 en el Calderón. Torres fue despedido, menos mal, con una generosa y agradecida ovación. Quizá fuera el de Fuenlabrada el menos flojo en un partido donde los futbolistas se confiaron con el tempranero gol del argentino que desafiaba el frescor del invierno junto al río con camisa de manga corta. Como si no pudieran hacer más, como si todo estuviera en manos del destino, como sin otro remedio que confiar en la victoria y los tres puntos igual que confiaba yo en que me devolvieran las llaves de la moto. Y eso fue lo que pasó. 

Los Cholocambios esta vez tuvieron menos efecto. La salida de Carrasco -por banda izquierda- nos dio más velocidad y sirvió para sacudirse el rato de agobio al que nos sometió el beticismo. Que tampoco fue excesivo. Aunque a algunos les encante magnificar todo lo mejorable olvidando quienes somos y de dónde venimos. Tuvo el belga el 2-0 que Adán impidió con una más que meritoria intervención. Por algo fue el portero de Mou... vale, sí, me he pasado.
Y a pesar de los agoreros, de los que silban, de los que se creen que somos otra cosa, a mí el partido (que más que malo fue insípido) me dejó algunas cositas buenas.  A saber: Moyá paró las dos que le llegaron. Flojas y desde lejos, por lo que la defensa estuvo correcta. Y van tres partidos de Liga sin encajar. Gaitán marcó y lleva seis goles. Gameiro, que salió por Torres, sigue intentándolo y creando oportunidades. Carrasco parece recuperado y el Cholo le dejó en la banda que le gusta.  El beticismo puso el ambiente y el buen rollo, pero a animar también les ganamos (y eso que la grada -ya digo- estaba rara). Y el club tuvo el bonito detalle de hacer que nuestros futbolistas saltarán al césped acompañados por los socios más antiguos. Y sólo por eso, por ver a mi sobrina Ana flipando con el detalle, y a más de medio estadio con un nudo en la garganta cuando lo explicaron por megáfonía, mereció la pena ir al campo. Por eso y por ver al Cholo a punto de meterse en el rectángulo a coger a alguno de los nuestros por la pechera para que no jugase con esa resignación de quien ha perdido las llaves de la moto y no sabe si se las devolverán o no. 
Y me las devolvieron (aún hay gente buena. Muchas gracias León, muchas gracias Eva). Y ganamos. Tres puntos más, aún en la primera vuelta, y seguimos en la pelea.

El jueves a las 19:15 Copa contra los señores de la SD Eibar. Luego a Bilbao, a Eibar y a Vitoria. Más nos valeponernos las  pilas e ir aprendiendo algo de euskera. Que sea un zorionak de semifinales y otros nueve puntos más. Partido a partido. Aúpa Atleti. Siempre. Incluso en tardes insípidas y sin las llaves de la moto. 

miércoles, 11 de enero de 2017

Perdemos, pasamos y debuta un albanés

El canterano albanés, Keidi Baré, debutó en la derrota y clasificación copera frente a Las Palmas.

Atleti 2 - Las Palmas 3

"La despedida más grata del Vicente Calderón. Ganarle en su casa al subcampeón de Europa no es tontería" me escribía el 'piopío' Nico Fabelo por twitter nada más acabar el partido. Antes de empezar, a media tarde, ya sabía que no iba a poder ir al campo porque mi Eva, que es Cristina, tenía que currar por la tarde y no podía encasquetarle las crías -otra vez- a los abuelos. De modo que se lo expliqué a las niñas lo mejor que pude: "¿Sabéis quien juega hoy?" "¡El Atleti!", respondieron a dúo a la pregunta repetida una y mil veces cada día de partido. "¿Viene ya mamá?" añadieron inmediatamente después pensando que me iría escopetado junto al río. Y mientras les explicaba que no, que me quedaba con ellas porque su madre saldría tarde, la mayor, que acaba de cumplir siete, me suelta: "Lo puedes ver por la tele y así te quedas con nosotras. Pero cuando nos hagamos grandes podemos ir todos al Atleti de noche". Mi María tiene estas cosas. Es muy grande.

La tarde fue complicada pero organizada. Las chicas se portaron bien. Deberes, baño y cena rápida mientras esperábamos a su madre. Empezó el partido y sonó la llave en la puerta. Las niñas me dieron un beso rápido y se fueron a la cama contándole el día a su progenitora, yo me centré en lo que pasaba en el campo al tiempo que me esforzaba por no pensar en coger la moto y salir pitando al campo cada vez que se veía la grada medio vacía. Para colmo el grupo de wasá  "Atléticos de fondo" comenzaba a arder con mensajes y fotos de nuestros compañeros de abono mostrando bocatas, chocolates y bombones... la madre que los parió a todos. Y yo a dieta. En casa. Haciendo el indio, pero bien.

No ocurrió casi nada en la primera parte. Lucas muy bien en la defensa. Juanfran algo más flojo en el extremo. Gaitán con ganas y Correa más centrado que de costumbre. Cero a cero y un Atleti muy irregular con agujeros atrás que permitieron dos ocasiones claras de los amarillos. Por cierto, Quique Setién no alineó a todos los titulares... pero el Cholo tampoco. 

La segunda mitad estuvo más animada. Sacó el Cholo a Gabi por Lucas y poco después marcó Griezmann tras una preciosa pared con Gaitán. Buen gol. Aunque fue aún mejor el del empate canario con un jugadón y zapatazo posterior de Livaja. El partido se convierte en un ir y venir de portería a portería sin pasar por el centro del campo. En estas Koke mete un patadón a seguir y el balón cae del cielo en un costado con Correa corriendo junto al defensa, ganándole la posición antes del bote y protegiendo con el cuerpo como si fuera el Kun Agüero. Lo de después fue de haber jugado mucho en la calle, entre los coches, esquivando patadas de los más burros del barrio. Le hizo un caño al portero a pierna cambiada propio de un futbolista que tiene más picardía y partidos con porterías de chaquetas que ninguno. Golazo de Corazoncito Correa. Dos uno y apenas media hora por delante. La eliminatoria estaba poco menos que resuelta. Los amarillos tenían que marcar tres goles. Parecía imposible. Y lo era. Aunque acabaran ganando. Marcaron el empate a dos en el 89 y el 2-3 en el 92. El resultado, por lo tanto, engaña mucho. Casi tanto como las crónicas y comentarios que he leído y escuchado esta mañana poniendo al Atleti en el disparadero y echando pestes contra lo mal que juega el equipo y el desastre del Cholo... en fin... cuando uno consume se arriesga a estas cosas.

Lo mejor de ayer fue, sin duda, la clasificación a cuartos. Partido a partido. Eliminatoria a eliminatoria. Ahora a esperar rival. Y a seguir disputando la Copa. Yo insisto con la etiqueta #CholoPonmeOtraCopa porque creo que pocas he disfrutado tanto como la de 2013 en el Bernabéu tras el Mirandazo. Diossssssss.

Otro detalle bonito. El Cholo sacó a Fernando Torres y el Calderón entero -y yo en mi casa- se puso en pie para aplaudirle y animarle. Ojalá vuelva a encontrarse con el gol y con la buena forma. Confío plenamente en él. Sé que cuando no pueda dar más al equipo -a su equipo, mi equipo, nuestro equipo- será el primero en quererse marchar sin que le pidamos que lo deje. Muy grande Torres. Ayer tampoco estuvo a su altura.

Y el último. Simeone le dio al canterano albanés Keidi Baré la oportunidad de debutar en el Calderón con el primer equipo. Salió por Correa con el 44 a la espalda. Íbamos ganando 2-1 y, con él en el campo, el resto de compañeros dieron por concluido el partido dejando que el joven internacional albanés sub 19 hiciera todo. Y claro, un medio centro defensivo que sale en un puesto que no es el suyo, más en punta, no puede sujetar a once profesionales con ganas de agradar a su entrenador en una de las mejores temporadas que se recuerdan de la Unión Deportiva Las Palmas. Pum, pum. Dos goles en cinco minutos. Y el joven albanés se fue contento por la clasificación, ilusionado por el debut y un poco mosca con la derrota. Como yo. 

El sábado viene el beticismo. Tres puntos en juego. A las 18:15 nos vemos en el Calderón. Con previa, por supuesto. Aúpa Atleti. Siempre.

domingo, 8 de enero de 2017

Otro fútbol es posible

 

Eibar 0 - Atleti 2

En uno de los tejadillos que cubren la grada de Ipurúa se puede leer (lo vi en inglés y en euskera, supongo que también estará en castellano) la leyenda "otro fútbol es posible".  Y viendo la primera parte del Atleti en un campo con el césped recién plantado y hielo suficiente para los cubatas de todos los espectadores del club armero, pues como que sí, que otro fútbol es posible y, si me apuran, hasta necesario. Vale, que son dos niveles distintos de discurso. Lo que el conjunto armero ha rotulado en su estadio es una declaración de intenciones como nuestro "nunca dejes de creer" y lo que sucedió en la primera parte es que el Atleti, con Griezmann y Torres arriba y con Giménez acompañando a Gabi en el centro del campo, no disparó ni una sola vez entre los tres palos de la portería rival. Ni una. Y claro, cada vez que en la tele encuadraban el "Otro fútbol es posible" a mí me daba por completar mentalmente "y necesario" pasando del milagro de una pequeña población guipuzcoana con un equipo saneado, noble y ordenado en la mejor Liga del mundo (ejem) al truño desconectado e inconexo del Atleti que no acertaba a dar dos pases seguidos con coherencia y cierto peligro. 
El árbitro fue protagonista. En el minuto 22 no expulsó a Adrián González, el hijo de Míchel, Míchel, Michel y lo que sigue, por una clarísima mano que era la segunda amarilla. Después perdonó un claro penalti en el área del Atleti a otra mano descarada de Vrsaljko y en la segunda parte concedería un gol en fuera de juego a Saúl. De pena. La primera parte fue penosa arriba aunque atrás hubo cierto orden y contención. Muy bien el Eibar.
En la segunda mitad primer Cholocambio: Juanfran por Vrsaljko. Y el gol de Saúl. 0-1. Otro Cholocambio: Gameiro por Torres y gol de Griezmann tras pared francesa de fantasía. 0-2 final. 
Mención especial a la peña rojiblanca La Txapela de Neptuno con sede en Bilbao que se desplazó hasta Eibar para animar a los nuestros. 
La posición de Giménez como medio centro a mí no me convenció, aunque entiendo que el Cholo no tiene muchas opciones más con Tiago y Augusto lesionados y Thomas en la Copa África. Cumplió el uruguayo aunque le robaron la cartera varías veces.
Y tres puntos para empezar el año en una semana donde dejó encarrilada la Copa en Canarias. Por cierto, en Eibar me parece que esta temporada aún no había ganado nadie.
Y sí, otro fútbol es posible. El de caballeros como los eibarreses que, a pesar del arbitraje, desearon por Twitter al Atleti un feliz regreso, le felicitaron por el triunfo y le emplazaron a la vuelta en el Calderón. Unos señores, como Gárate, el eibarrés del Atleti que fue un ejemplo dentro y fuera del campo. Pues eso, que claro que es posible. 


miércoles, 4 de enero de 2017

Gameiro en las Canarias

 
COPA - 1/8 de final. Ida

UD Las Palmas 0 - Atleti 2

Fue Gameiro a las Canarias a disputar con el resto del equipo el primer partido del año 2017. Y las Islas Afortunadas no son Arabia Saudí ni los Píopío celebraban un aniversario jugando una pachanga contra el subcampeón de la Champions. 
Estuvo Gameiro en la punta de ataque junto a su compatriota Griezmann, los dos cuestionados por su falta de gol aunque llevan seis chicharros cada uno en Liga. Pero la noticia era el regreso de Juanfran a su puesto natural, de interior, más arriba, en la misma banda.  Otra novedad: Giménez también jugaría unos minutos en el centro del campo en una probatura del Cholo que aprovechó las vacaciones familiares para dejar claro lo que los atléticos sabíamos: que tiene contrato y que le vamos a disfrutar y sufrir hasta que lo cumpla. Ojalá le prorrogaran hasta que él quiera. 

A mí con el Cholo me pasa como con Fernando Torres. Son tan del Atleti que cuando vean que no pueden sumar, se irán sin que tengamos que decirles nada. Siempre les estaremos agradecidos. Siempre.

Fue el regreso del Atleti más cholista. Ese que tanto nos gusta y tan buen resultado da. Volviendo a lo de Gameiro y el partido. Decía que el francés empieza a ser cuestionado por un sector de la grada que no se debe acordar del penoso arranque de la rata mexicana que en los ochenta nos dio una Copa del Rey y fue pichichi indio antes de que le salieran los cuernos y se fuera a la acera de enfrente. Parece que nadie recuerda los inicios de Diego "Costra" y las cesiones a Elche, Valladolid, Rayo... antes de que el Cholo le hiciera explotar. Parece que ni siquiera tenemos memoria sobre los inicios de Griezmann con la zamarra del Glorioso. Hasta Navidades parecía que nos habían dado gremlin por liebre. Con el año nuevo se destapó Antoñito y pasó a ser don Antonio. Pues eso, que paciencia con Kevin, nuestro Kevin Gameiro. 

Todos sabemos que los delanteros viven del gol y que el gol va en rachas. Nadie le puede reprochar al  gabacho nuevo su trabajo y su esfuerzo. Derrocha coraje y corazón pero, y esto es lo más importante, genera muchas ocasiones él solo. Vamos, que él se lo guisa y -confianza- él se lo come. Yo creo en él. Por todo lo dicho y porque el Cholo, que ha demostrado sacar lo mejor de cada jugador, también lo hace. Llegará. Y se va a hinchar. Por eso hay que animarle a tope mientras esté en el campo. Y si no cuajara... será Simeone quien decida que no hay más crédito y que no es su momento. Mientras tanto, a muerte con él.

El partido en Canarias fue el regreso del Atleti más cholista. Firme atrás (mención especial para Vrsaljko y Moyà) y letal al contragolpe. Koke marcó desde lejos tras recoger un rechace. Doble buena noticia protagonizada por el de Vallecas: Rechace y disparo. Su primer gol con la rojiblanca en Copa, para los de las estadísticas.
Griezmann marcó tras dejada de la muerte de Gameiro (que falló un mano a mano clarísimo y otra no tan descarada) con la cabeza después de magistral centro al área del croata sin vocales dispuesto a que toda Europa se aprenda su nombre.

Lo peor, que la vuelta es el martes a las 21:15 junto al río, en invierno, con todo muy encarrilado. Pero antes, el sábado 7, a las 16:15, mi hija cumplirá siete rojiblancos años viendo a nuestro Atleti por la tele jugar en Eibar para disputarle los tres primeros puntos de la Liga en el año de Cardiff, de la Copa... y de la Liga, que falta toda la segunda vuelta y algo más. Feliz y rojiblanco 2017.

#CholoPonmeOtraCopa
#QueSeaCardiff