jueves, 24 de septiembre de 2009

Poco nervio, muchos nervios



Atleti 2 - Almería 2

Ayer el día comenzaba con problemas. Los de la cárcel de Valdemoro no acababan de darnos el permiso para grabar al día siguiente (o sea, hoy). Mi jefe sufría un pinzamiento y me comunicaba que debía suplirle en el viaje a Madagascar, que fuera preparando la maleta porque el sábado volaba a la inmensa isla roja africana. Mi mujer seguía con un catarro que se suma a los cinco meses de gestación y mi padre andaba con un tobillo metido en hielo para aliviar un golpe en la pierna... vamos, un día complicado.
A todo esto me llama mi hermano el pequeño y me dice que no se puede pasar a recogerme en la moto porque se le ha roto el casco y, para colmo, se ha cargado un grifo de su casa y está que echa pestes por los cuatro costados.
Al final, cojo mi coche y me encuentro en el campo con mi hermano (el del casco y el grifo roto); mi otro hermano, y su hijo -o sea, mi sobrino- con la mochila repleta de bocatas de tortilla de patata cocinada expresamente por nuestra madre -y abuela- para el partido contra el Almería. "Si no vemos fútbol, al menos cenamos bien", pensamos los cuatro previendo lo que se nos venía encima.

Sin nervio
Cuando en tu propio campo el equipo rival comienza acosándote y haciéndote un par de ocasiones de gol... la cosa es para cabrearse. Incluso más que si el propio Forlán falla un penalti que él mismo se fabricó tirando de experiencia. Al equipo le falta nervio, un poco de ambición, creerse que son capaces de comerse a cualquiera, salir con ganas de morder al contrario, de comerse el campo, de acogotar al contrario. Nada de eso. Todos los equipos que vienen al Calderón lo hacen sabiendo que se nos pueden merendar, sin miedo, sin complejos, con los tres puntos casi seguros. De hecho, ayer el Almería se dejó dos en el Manzanares porque no acababan de creer que fuera tan sencillo.

Con nervios
El portero, por falta de partidos y los cinco del Nou Camp, salió con nervios. Hasta dejó salir un balón fuera cuando lo normal era cogerlo y espolear al equipo sin perder tiempo. Y eso que le aplaudimos.
La defensa como un flan. Unos mirándose a otros. Todos pendientes de no ser ellos los que cometan el error, quitándose la responsabilidad de encima alejándose de la jugada del peligro contrario. Con una oreja puesta en la grada y sin dejar de mirar al banquillo para ver si hay gestos de aprobación.
El centro del campo absolutamente desquiciado, tembloroso, sin nadie que se atreva a echarse el equipo a las costillas, con pases de medio metro, con quítame de aquí este marrón que yo no he sido. Con las bandas metidas en el círculo central y haciendo un esfuerzo por correr con las piernas completamente rígidas y el cerebro agarrotado.
Los delanteros tirando desde cualquier sitio o regateando hasta la extenuación. Sin ideas, sin remate rápido. Abducidos por una histeria invisible que, al final, se contagia a la grada (y viceversa).

"Mala racha"
El ladrón con sentencia firme por apropiación indebida que preside el club, Cerezo, dijo que era una mala racha. Menos mal. El día del Barsa era "mala suerte". No sé si sabrá o no de fútbol el ínclito elemento, de lo que sí sabe es de echarle morro a la vida... y ahí está, tan pancho, con el Atleti que se ha quedado para su uso particular y vendiéndonos motos todos los días.
Lo de Valencia espero que no lo defina como "unos errores puntuales". En fin.

Yo no me resigno. Sigo creyendo en el equipo. Y aunque no ganemos un partido, ahí estaré para animar y tratar de sacar esto adelante. Bueno, estaré en la distancia. El sábado, después del partido contra el Valencia me piro a Madagascar medio mes. Seguiré desde allí, con mi camiseta y mi corazón rojiblanco, la recuperación de los nuestros.

Aupa Atleti.

domingo, 20 de septiembre de 2009

Mejor que el año pasado


Barsa 5 - Atleti 2

Imbatidos en Champions. Le marcamos dos goles al Barsa en su casa rompiendo el récord de imbatibilidad de Víctor Valdés. Marcan Agüero y Forlán.... dicho así parece que este año, con la misma plantilla que el año pasado, optamos al triplete. Pero la realidad depende de quién te la cuente.
Lo cierto es que en Champions hemos empatado a cero en casa contra un equipo desconocido de Nicosia (la capital de Chipre, para los despistados), vamos, ninguna potencia futbolística. Y ayer, en el Nou Camp, el equipo mejoró el 6-1 de la temporada pasada con un 5-2. La progresión es lenta, pero es progresión. Si el año que viene quedamos 4-3, en dos añitos les ganamos allí por un 3-4. En fin, que hay que hacer chistes para no desesperar.

Roberto
El Atleti, como el año pasado con Coupet, y como el anterior con Pikachu Cuéllar, se enfrentó al Barsa con el portero suplente. Cada vez que llegamos allí nos llevamos un saco de goles. El bueno de Roberto, que ya estuvo en el Atleti y salió para pasarse una temporada calentando banquillo en el Recre antes de que descendiera, ha vuelto al club gracias a la habilidad de Suso García Pitarch que, como viene siendo habitual, lo regaló y lo volvió a comprar por 1,5 millones de euros. Un fenómeno nuestro director deportivo. Un crack de las finanzas, de la economía de mercado, de la compra-venta de jugadores para beneficio de las arcas del club... (mecagohastaensuputamadre).
Decía que el bueno de Roberto no tuvo muchas opciones porque antes de que dejara la toalla en la red ya le habían pegado un zambombazo al larguero, y antes de que se cumpliese el minuto dos, y con los guantes aún por ajustar debido al susto del zurriagazo anterior, ya estaba sacando el balón de dentro de la portería. Así hasta cinco veces en su primer partido oficial de temporada... son demasiados para un portero que debuta. La ilusión que debía de tener y con la que tendría que contagiar a sus compañeros se desvaneció en las mallas.


Porteros

Lo de los porteros del Atleti es un misterio. Este año hemos fichado a dos: Roberto (que ya estuvo en el club, se vendió por medio y se recompró por uno y medio) y Asenjo, un guardameta joven con un año de experiencia en la primera división con el Pucela (seis millones de euros). La pregunta surge cuando te enteras de que el portero titular de las categorías inferiores de la selección nacional ha venido siendo un chico de la cantera, De Gea, y que ha perdido esta titularidad cuando el Valladolid le dio la oportunidad a Asenjo para defender al equipo en la máxima categoría. ¿Por qué no han subido a De Gea al primer equipo? ¿Por qué Abel, que ha sido portero, no le ha dado una oportunidad a De Gea? ¿Hay algún interés en que el del filial no juegue? ¿Alguien pierde su comisión si el chico se convierte en una figura? No lo entiendo, de verdad.

Cantera
Lo de los chavales de la cantera, con Abel el cobarde, sigo sin entenderlo. Contra el Apoel estuvieron durante toda la segunda parte calentando en la banda Rubén Pérez y Keko. Ninguno de los dos salió. Abel sigue quejándose de la falta de plantilla y de que tendrá que tirar de la cantera. Pero está visto que sólo tira de ella para rellenar banquillo, para completar las listas de las convocatorias. Por ahora no ha habido ninguna oportunidad real a los chavales. Me suena todo a Ignacio Camacho. Recuerdo su debut de titular contra el Barsa en el Calderón y el buen partido que hizo. Después fueron racaneándole minutos y más minutos hasta dejarle en otro relleno de banquillo. Quiero pensar que se le cuidaba para la intervención de cadera de la que se está recuperando, pero me temo que me equivocaré.

Lo de ayer
Que el Barsa es un equipazo, no tiene discusión. Que juegan muy bien, de memoria, con mucho toque y una presión espectacular, tampoco es noticia. Ayer nos fulminaron en media hora. Nos metieron tres que pudieron ser cinco (luego lo serían) mientras nosotros, sin ánimo, desmoralizados, y completamente desbordados atrás, creíamos que podíamos plantar cara porque delante nos sobra mucha calidad. Lástima que Maxi no estuviera inspirado, que Forlán no tuviera su mejor día, que Simao se perdiera en el caracoleo y que Agüero no empezase con la intensidad con la que acabó. Jurado, como en los tres partidos anteriores, el más correcto -cuando juega de media punta, insisto, no en la banda-.
Assunçao muy voluntarioso y trabajador, los de atrás, mejor no analizar mucho. Intentaron tirar el fuera de juego sin mucho éxito (nos cayeron cinco), se veían desbordados por las bandas (y eso que Perea y Antonio no estuvieron mal) y Ufa y Pablo en el centro hicieron lo que pudieron. En resumen. Individualmente, nuestros chicos se salvaron, no hicieron un mal partido. Pero el equipo, como tal, en conjunto, no rula, no va, no funciona... y no me pregunten por qué. Quizá Abel tenga las respuestas.

Lo de siempre
En cuanto al propietario y presidente del Club Atlético de Madrid S.A.D. les invito, again, a que se piren. Vendan todas sus acciones a socios, empresas, patrocinadores y entidades públicas para que volvamos a ser un club de fútbol y recuperemos el derecho a opinar y a decidir. Como les diría Lola Flores si ella fuese el Atleti: "Si me queréis, irse".

El miércoles viene el Almería del traidor mexicano. Iremos sin ilusión, sin esperanza, resignados a ver qué hacen los nuestros. Pero ahí estaremos para animar con nuestra presencia.

Vamos, Atleti.

miércoles, 16 de septiembre de 2009

Nicosia, capital de Chipre

 
Atleti 0 - Apoel 0
La capital de Chipre, una isla arrinconada en el Mediterráneo, entre Turquía, Siria y Grecia, es Nicosia. Los chipriotas se independizaron de Gran Bretaña en 1960 y, según el último censo, no llegan en toda la isla a 800.000 habitantes. En Nicosia, la capital, ya lo he dicho, viven 309.500 habitantes. Uno de sus equipos de fútbol (creo que ni siquiera son profesionales) es el Apoel que ayer consiguió empatar en competición oficial (Champions) al Atlético de Madrid en el Calderón.

En la grada había cerca de 2.000 grecochipriotas animando como posesos a su equipo. Son muy malos pero hicieron un papel digno que celebraron como si se tratase de la mayor gesta deportiva conseguida por algún paisano. Todo un espectáculo oírles y verles cantar y bailar. Muy educados, muy alegres, muy coloridos y -me repito- muy malos.
El partido fue una mierda.

La primera parte aún sigo sin entenderla. ¿Por qué pone a Jurado en la banda si durante toda una temporada -en el Atleti- se demostró que ahí no funciona y durante otra temporada completa -en Mallorca- ha demostrado que su sitio es de media punta? ¿No jugó el otro día de media punta contra el Racing y fue el mejor? Pues eso. En la segunda parte Abel lo colocó en su sitio y no es que maravillase el equipo, pero hicieron alguna ocasión.
El Kun estuvo desaparecido y Forlán no tuvo fortuna. Estrelló un balón en la escuadra y subió la cotización del portero chipriota que, no me extrañaría, esté ya en la agenda de Suso para suplir la larga ausencia de Asenjo (paradón ayer en el minuto 7). ¿Por qué coño hemos fichado dos porteros si tenemos al titular de las categorías inferiores de la selección en casa? ¿Es que si juega De Gea alguien no se lo lleva muerto?

¿Por qué Abel se empeña a meter a Sinama en la banda? Ayer jugó hasta de lateral. Lo de "jugó" es mucho decir. El francés cuajó sus mejores temporadas en el Recre cuando jugaba de killer. En el Atleti sólo ha ocupado este puesto el primer partido de la temporada pasada contra el Málaga, cuando ganamos 4-0 y metió dos goles. En fin...
¿Por qué Rubén Pérez y Keko estuvieron calentando toda la segunda parte en la banda? ¿Por qué seguimos pagando un sueldo a Reyes si ni siquiera le convocan porque no está ni para hinchar los balones? ¿Será posible que echemos de menos a Mariano Pernía? En fin... este Atleti me mata.

A ver qué pasa el sábado en Barcelona. Cualquier cosa.
 
 

lunes, 14 de septiembre de 2009

Ardo (a posteriori) en París

Atleti 1 - Racing 1

El sábado estaba en París. Sabía que a las 18:00 venia el Racing, y que dos horas antes había que estar en la puerta 0 para decirle a los cuatreros que se han enriquecido con el club que no les queremos, que tienen que vender, que es hora de un cambio y que la SAD que Gil padre tanto defendió, se ha vuelto en contra del equipo. Aunque los que se adueñaron indebidamente de él no estén preocupados por llegar a fin de mes.
Les dejé dicho a mis hermanos que me enviaran un mensajito con el resultado final, pero como me conocen y son compasivos, se cortaron. Andaba en París celebrando mi aniversario de boda con mi mujer embarazada de cinco meses de la que ya es una atlética desde el seno materno. Y no quisieron amargarme la cena en el barquito viendo las luces de un París maravilloso (lástima que esté llena de franceses).
Hoy he llegado y me he empapado de internet. De periódicos, webs, vídeos y comentarios colgados desde la tarde del sábado y durante todo el domingo. Poco que decir. 
En mi familia hay mucho cabreo con el equipo (que son los que menos culpa tienen), pero estas cosas son así. Nos encabronamos los aficionados porque estamos hasta el gorro de este sinsentido en una directiva que sólo piensa en enriquecerse... y los futbolistas se contagian, y nosotros las pagamos con ellos... vamos, el eterno retorno.
He llamado a mi sobrino y mañana nos vamos los dos a animar al Atleti contra los chipriotas. Yo aún creo en este equipo. Aunque no esté Heitinga (mira que me gustaba a mí este tío, y eso que no hizo cuajó del todo porque no le ponían en su sitio), aunque Abel siga sin dar oportunidades a De Gea, aunque Koke y Keko sigan siendo el ultimísimo recurso, aunque Valera siga en el primer equipo, aunque Cleber Santana tenga que repartir juego (esto lo digo aguantándome la risa). Total, que mañana, ante los de Nicosia, estaremos animando al equipo para ver si conseguimos tres puntitos de Champions y cogemos un poco de carrerilla para ponerle al Barsa el sábado las cosas difíciles. 
Yo sigo creyendo en el equipo.


Vamos, Atleti, vamos.