lunes, 21 de diciembre de 2009

Feliz Navidad, sinvergüenzas

Tenerife 1 - Atleti 1
El cuerpo me pedía titular "Feliz Navidad, hijos de puta", pero estoy convencido de que sus madres no tienen nada que ver con este despropósito. Empezando por los ladrones Cerezo y Gil Marín -sentenciados por apropiación indebida del club-, siguiendo por García Pitarch y continuando por todos los jugadores que no entienden de escudos, ni de equipos y que sólo atienden a sus caprichos, sus cuentas corrientes y sus egos infames.
Lo de ayer en el Heliodoro es para cagarse en sus muelas. En las de todos.
- Bar La Vega (Ciudad de los Ángeles, Madrid). Alrededor de 20 personas viendo el partido. Edad media por encima de los 60 años. Viejos socios atléticos desencantados y un abonado que, después de 38 años, regala su carné a quien lo quiera (nadie lo quiere). Ambiente de humo, copas y cafés. Comentarios desesperanzados y mucho dolor en las entrañas.
- El camarero, Carlos (de República Dominicana) jura y perjura contra el Atleti porque le ha puesto un 2 fijo en la quiniela y la cosa no pinta nada bien.

El partido 
En el minuto tres un balón aéreo que deja pasar Juanito le llega a un contrario que la vuelve a poner en el borde del área pequeña y Juanito vuelve a dejar pasar. Gol de Nino. El delantero tinerfeño no tenía otra opción. Aunque se le veía en el gesto que le daba un poco de vergüenza marcar así, tan fácil, sin oposición, nada más empezar...
El Tenerife (que tiene muchas papeletas para volver a Segunda) no hacía nada y, aún así, tenía el balón, veía cómo trotaban detrás de la bola los del Atleti y todo estaba tranquilo. El Atleti, sin nada atrás, sin nada delante y, por supuesto, sin nadie en el medio. Bueno sí, los dos agujeros negros (Asunçao y Cléber) que se encargan de absorber la energía de sus compañeros y de todos los aficionados que nos preguntamos qué coño hacen esos dos tíos infames en primera división. Y en el Atleti. Joder, no lo entiendo.
La única vez que cruzamos la raya del centro del campo, en un rebote, Jurado decide tirar a puerta y ¡zas! gol. Forlán, Simao y Maxi le miran con desconfianza. Sólo Ufjalusi se acerca a celebrarlo con él. Parece que el gaditano ha hecho algo que no estaba pactado en el vestuario. Ha marcado un gol sin intentar regatear, sin intentar pasársela a alguien cerca de la raya de meta, sin especular... seguro que dejan de hablarle.
Y antes de que acabe el partido un penalti riguroso (Domínguez estaba retirando la mano y el balón le golpeó más en el pecho que en el brazo) lo tira Nino y, en compensación por el regalo del minuto tres, no lo mete. Asenjo se hace un paradón (ayer estuvo bastante más fino el fichaje estrella).

La segunda parte fue más de lo mismo. A saber: el Tenerife, muy poquito. El Atleti, nada de nada.
No me di cuenta de que estaba jugando Maxi hasta que lo quitaron. La salida de Sinama fue genial para ver lo inútil que es este tío. Tuvo en sus botas el gol del triunfo pero dudó si tirar a puerta o darle un pase inalcanzable a un Forlán absolutamente desconocido y muy cercano al penoso delantero del Manchester que estuvo casi un año sin marcar y protagonizando los chistes de todos los aficionados de la Premier.

Asenjo, ya lo he dicho, fue el único que estuvo algo más fino. Siempre y cuando exceptuemos los saques (con la mano y con el pie) que, oh casualidad, siempre le caen a algún contrario. Ignoro si lo hace a propósito o si sus compañeros dejan siempre que se les adelante el contrario.

Un despropósito.

Ni siquiera fueron capaces de dar tres pases seguidos a 21 grados de temperatura, contra un recién ascendido. Y ahí seguimos, mirando con pánico el precipicio de la Segunda. Con nervios, a falta de cuatro jornadas para que acabe la primera vuelta, eliminados de la Champions, con otro entrenador que dice no ver futuro y tener que afrontar cada partido como una oportunidad para sumar y evitar la catástrofe. Y yo me pregunto: ¿Por qué coño no sube a los chavales del madrileño? ¿Por qué no venden a Maxi antes de que se vaya gratis? ¿Por qué no regalan a Sinama de una puta vez? ¿Por qué no dejaron que Cléber hiciese chilenas en el Mallorca? ¿No hay ningún central en la cantera mejor que Juanito, Pablo o Perea? ¿No se quería ir Simao? ¿El club no tiene psicoterapeutas para recuperar a Forlán?

En fin. Feliz Navidad a todos y que el 2010 sea más benévolo con nuestras ilusiones.

Atleti, esto no puede seguir así.   



miércoles, 16 de diciembre de 2009

¡Que se jodan!

Me escribe mi buen amigo Quico, del que ya he hablado otras veces en este blog. Es el fundador de la Peña Españolista de Madrid y un sabinero irredento (como el menda). Pego aquí parte de su mail porque no tiene desperdicio: ¡Que se jodan!

Estamos juntos en el Sur. De la clasificaión, digo. Los reales madriles, laportianos azulgranas y otros viven en el Norte de los-puestos-champion-lí. Nosotros, bajando al Sur, hacia el abismo de alcantarilla que lleva al infierno (a-segunda-a segunda-a segunda-pericos-cabrones-d
ónde-está-jarque-si-te-ha pillao-el-toro-jodeté-jodeté-) Perlas oidas en el Nou Camp. Y luego está Iturralde y el penalty que, otra vez!, no fue.

Y nosotros, "bajando al Sur", de la mano de los colchones de rayas canallas, con quien nos jugaremos, ay!, en mayo, quién se va a la-liga-adelante, (que yo no sé por qué a la Segunda la llamarán adelante. Tiene guasa)....

Y mientras, Atleti y Espanyol seguiremos al calor de un domingo salvados , ya vamos p'arriba, a la UEFA, este año sí hay equipo.. y al siguiente domingo, pandilla de vagos, con nuestra camiseta no se juega, limpieza ya, Cerezo dimisión y Pochetino al paredón. Hasta el domingo que viene. Lo que yo te diga, unermano, primos hermanos somos pericos y colchoneros. Lllorando por los rincones, bajando a la alcantarilla, acariciando balones, se infartan en la ribera del Llobregat los corazones

Pero ellos -los del Norte, digo- ni sufren ni padecen. Dilo conmigo: que se jodan. En el Sur hace más calorcito, el corazón late de verdad. Y, además, qué coño!, para hacer bien el amor hay que venir al Sur.

Y yo, amigo, ¡qué triste!, me quedé sin entrada para ver a Sabina. Gol!. Uy!.

domingo, 13 de diciembre de 2009

Nada en la nevera






Atleti 1 - Villarreal 2

No tienen corazón. Los futbolistas de hoy son tan profesionales que les da igual vestir la rojiblanca del Atleti que la amarilla del Villarreal. Salen, corren, tratan de equivocarse lo menos posible, de que no se noten sus fallos, de no encabronar demasiado a sus compañeros y de salvar los muebles para cobrar a fin de mes. Y si perdemos... pues nada, el fútbol es así, el balón no quiere entrar, seguro que pasamos esta racha, hacemos todo lo que podemos... tópicos y lugares comunes para poner paños calientes a la afición, seguir en el negocio y procurar que el próximo día se note un poco menos que significa tanto para miles de personas que tienen sus ilusiones y esperanzas depositadas en los logros de un equipo de fútbol. 

Nada
Y cuando digo nada es nada. El Atleti no ha tenido portero en la segunda parte porque Asenjo tiene el síndrome Leo Franco y parece estar condenado a estar bajo el larguero. Como si le diesen corrientes eléctricas en los testículos cuando deja de pisar la raya de gol. Es cierto que en la primera mitad hizo un par de intervenciones meritorias (en la raya, a tiros peligrosos desde fuera del área), pero en la segunda parte pudo haber hecho algo más en los dos balones que colgaron desde la misma banda al área pequeña.
El Atleti no ha tenido defensas (excepción de Ufjalusi). Los dos goles vinieron por la banda de Valera. ¿Seguirá mucho tiempo este chico viviendo de la Primera División? Por ahora el Atleti lo sigue teniendo en nómina. Supongo que tendrá una bonificación de la Seguridad Social por tratarse de un contrato de inserción, de una obra caritativa y social. ¿No sería mejor que trabajase pegando sobres y sellos en la Fundación? Lo de Perea y Juanito es más de lo mismo. Dos centrales que no se hablan, que no escuchan a Asenjo -en el supuesto caso de que deje de pisar la raya y les diga algo- y, lo que es peor, que dejan rematar a placer a los delanteros en el área pequeña sin ofrecer ninguna resistencia. Inexplicable.
El Atleti tampoco tiene centro del campo porque Simao sólo apareció para marcar un pase en profundidad de Reyes. Asunçao -de lo mejorcito ayer- sigue sin convencer con su falta de criterio en el pase y el exceso de faltas; y Maxi ni está, ni se le espera.
El Atleti no ha tenido delanteros porque Jurado no puede ser el hombre más adelantado cuando Forlán intenta estar en todas partes sin estar en ninguna. El uruguayo seguramente haga muchos kilómetros cada partido. Eso sí, a su ritmo y sin mucho acierto en el control, ni en el pase, ni mucho menos en el disparo. No está ni a un diez por ciento de lo que hemos visto en temporadas anteriores. Sin el Kun este equipo es una auténtica broma.

En la nevera
Las noches de invierno en el Calderón son frías. Muy frías. El río humedece el ambiente y cuando sopla el viento que se cuela por las esquinas de los videomarcadoes no hay modo de entrar en calor. Ni siquiera el nefasto arbitraje (a la altura del nefasto espectáculo) logró calentarnos lo suficiente como para no arrepentirnos de haber vuelto a caer en la trampa. Y sin embargo ahí estábamos casi 40.000 gilipollas esperando que once sinvergüenzas sin corazón nos incendiaran el alma con una jugada que aplaudir, algún pase que comentar o cualquier regate fuera de lo normal. Nada de nada.
Con mucho frío, con muy mala leche y con dos goles idénticos del peor Villarreal que ha pasado nunca por el Calderón y que en el descuento -merecidamente- nos dejó helados.

Tesis, deseos y sueños

Seguro que el club ficha a alguna super mega estrella desconocida que le sirva para que nos despistemos un poco de la miseria futbolística que vivimos a orillas del Manzanares. Yo sólo confío en que Quique S. Flowers le eche un par de huevos y suba a cinco o seis chavales de la cantera al equipo titular. Y puestos a soñar, me imagino el Cerro del Espino repleto hasta la bandera con una masa de socios fuera esperando entrar para ver al Madrileño mientras el primer equipo juega con el estadio vacío y algunos de sus futbolistas son suspendidos de empleo y sueldo por estafa laboral.

Es lo malo de escribir en caliente, que se pone uno de muy mala hostia.

¿Por qué somos del Atleti si esto no es el Atleti?   

 

miércoles, 9 de diciembre de 2009

El equipo de trapo


Atleti 0 - Oporto 3

Uno lee la historia del club, oye a los mayores hablar de los nuestros, y no sabes si te están vacilando o es que a ti te timan cada vez que ves al que dicen es el mismo club. Lo de ayer, no por repetido, es para cagarse en la madre que los parió. Y luego sale el bueno de Antonio López diciendo que están en ello, que no entiende qué pasa, que ellos quieren jugar mejor, que quieren ganar. ¿Y por qué coño no ganan? Bueno, siendo más benévolos: ¿Por qué cojones no hacen algo por ganar? No sé, correr un poco, pelear con el contrario, tirar a puerta, desmarcarse, controlar el balón sin perderlo, dar un pase decente que no parezca un melón caído del cielo... ¿es que no entrenan estos tíos? Joder, si son profesionales se supone que viven de esto, de jugar al fútbol, no de "hacer como que juegan". Lo de ayer fue -insisto- másde lo mismo. Una pantomima de equipo. El equipo de trapo. Bautizado queda.

Por líneas
Asenjo tuvo un par de intervenciones meritorias, no lo niego. Pero en el primer gol quizá pudo colocar a la defensa inexistente, o estar atento al remate desde fuera del área pequeña, o qué se yo. El caso es que no nos pueden marcar en el minuto uno rematando sin oposición en un córner. Lo del segundo gol es para nota. Un lanzamiento lejano -sí, iba fuerte- que consigue detener, pero no parar. Total, que se le escapa y llega un fulano al rebote -de nuevo la defensa acompañando a los delanteros más que cubriéndolos- y se lo cuela. Eso es para ponerle una cruz a Asenjo y tenerle viendo parar a De Gea unos cuantos partidos. En fin, que sigue sin convencerme el portero. Seguimos fichando a tíos que hacen la temporada de su vida en un club mediocre y luego no rinden en el Atleti. No queda otra que seguir esperando y confiar -qué remedio- en el portero de trapo.

La defensa es de lo peor que hemos visto en el Calderón en años y años. Y mira que hemos visto defensas negados, blandos, rígidos, sin velocidad, que no se saben colocar, que meten goles en propia puerta, que no saben colocarse, que no se coordinan en el fuera de juego, que defienden en zona mirando el césped y sin tener en cuenta al contrario. Lo de Valera es de juzgado de guardia. Este chico no está para un equipo de primera división. Domínguez, muy verde y acomplejado. Perea, en su línea, no sabe sacar el balón (¿por qué siempre se lo dan a él para que lo haga?) y sólo sería válido para un futuro equipo de atletismo. Juanito más que prescindible. Aún no se ha estrenado de cabeza. Pretende suplir su falta de velocidad con colocación y no lo consigue nunca. Para llorar. Todo facilidades. Una defensa de trapo.

La media o como quiera que le llamen ahora los listos del fútbol es, a mi gusto, lo peor del equipo. Aquí se cuajan las diferencias. Tíos que sepan recuperar balones, que sepan repartirlos. Que sean los primeros en defender y los primeros en atacar. Son el corazón. Y claro, cuando tenemos en esa posición a Asunçao y Cléber Santana, el motor del equipo se gripa. Son dos auténticos agujeros negros, dos negaciones que -en el caso de Cléber- no han aportado al equipo nada más que medianía y vulgaridad. Para hacer lo que hacen estos dos tíos me subo a un par de chicos del filial y me ahorro una pasta. Las bandas ayer tampoco estuvieron mucho mejor. Maxi no rascó bola y salió pitado para dar entrada a un Reyes aclamado en la banda que se aceleró tanto queriendo solucionar él solo el partido, que se diluyó como un azucarillo removido por el juego ordenado y serio del equipo portugués (nada espectacular, pero muy bien plantado). Simao sigue intentándolo. Aunque ayer, ni eso.

Delanteros teníamos el año pasado con Kun y Forlán enchufados. Esta temporada, cuando parecía que estaban despertando tras marcar al colista y a un Espanyol que se hunde, no acaban de encontrar la confianza suficiente. Bueno, me desdigo. El Kun va hacia arriba (pero se nos lesiona nada más empezar la segunda parte con una sobrecarga muscular), pero Forlán no está centrado. Todo lo que tira va flojo, o desviado, o es peor opción que el pase a un compañero. Hace muchos kilómetros, baja a recuperar balones al borde de nuestra área y luego... no tiene fuelle en el contrataque, no marca lo que antes metía sin mirar. Uno mira al banquillo y ve a Sinama y le entran ganas de llorar. ¿Por qué no se quedó De las Cuevas? Total que sale Jurado para sustituir al Kun y Jurado no sabe lo que es jugar en punta. Se pasa toda la segunda parte preguntándole a un Forlán desfondado dónde se coloca para no molestarle y qué tiene que hacer para que le pasen un balón... penosa la delantera de trapo de ayer.

El árbitro
Si el equipo estuvo mal, que lo estuvo. El árbitro estuvo peor. Se comió tres penaltis de libro que podían haber cambiado el rumbo del partido. Una tarascada al Kun por detrás cuando tenía el balón controlado. Dijo que se tiró y le echó una filípica sin tarjeta. Otra mano descomunal a tiro de Maxi (a bocajarro) que vimos todos menos el línea que lo tenía a veinte metros. Y un empujón continuado en forma de carga ilegal contra Simao que, para colmo, se llevó tarjeta por no aguantar el peso del defensa en un penalti descarado. De nada sirvió que todos los que estábamos helados de frío al ralente del Manzanares cantásemos el "Puta Platini, puta Platini". Bueno sí, para que yo pensase en que los de la UEFA nos iban a chapar el campo, no como a los del Olympic de Marsella que, por lo visto, ayer encendieron hasta diez bengalas en el partido...

La "uefalí"
Cuando perdíamos 0-2 en el minuto 14 y mi sobrino me dice que acaba de macar el Apoel en Stanford Bridge, se me cayó el alma a los pies. "Nos lo merecemos", pensé. Bueno, no. Se lo merecen estos cabrones, pero nosotros no tenemos la culpa. ¿Por qué nos pasa esto? Luego vino la remontada del Chelsea y los olés de los 200 aficionados del Oporto que flipaban con el equipo de trapo que tenían enfrente. Nos metieron otro golazo que dejó a Juanito cosiéndose los riñones y pensando en ver la repetición por la tele para saber por dónde se coló el tal Hulk, increíble. Aunque con Juanito, no es para tanto, claro. 0-3 y empata el Apoel a dos goles. Echo mis cuentas: Atleti 3 puntos, Apoel 3 puntos; a nosotros nos ha metido 4 el Chelsea y el Oporto ya lleva 3 aquí... vamos, que nos quedamos fuera de la "Uefalí" o como coño se llame. Mi sobrino menea la cabeza y se va quitando de la cabeza una posible final contra el Liverpool donde el árbitro no se nos mee en la cara. Ponemos la radio y dicen que estamos clasificados. ¿Cómo? Lo explica y resulta que sólo cuenta el golaverage particular y, claro, aquí empatamos a cero con las bestias chipriotas y en su casa logramos un merecidísimo empate a uno contra estas máquinas del balompié.

Y hasta aquí la mala leche acumulada por el escarnio de ayer, por la vergüenza de ver al equipo de trapo, por la desilusión rebosante y la imagen de penosos que hemos dado a todo el continente.

Está visto. El año pasado nos eliminaron de Europa sin perder; este año seguimos en Europa sin ganar. ¿Alguien lo entiende?

Somos nosotros, Atleti, somos nosotros.

domingo, 6 de diciembre de 2009

Aprendiendo a ganar


Xerez 0 - Atleti 2

Tarde de sofá y relax en mi casa (por fin) después de unas semanas de idas y venidas por Sevilla, Santander y Torrelavega. Me compro en ONO el partido por 10 euracos pensando en la victoria más que en el buen juego. Zapeo para ver la victoria en la Copa Davis y el partido serio del Atleti con una defensa atípica: Valera, Perea, Juanito y Domínguez (injustamente expulsado al final).
Me gusta el rombo de Quique. Jurado de media punta da mucho más juego que en la banda. Por fin un técnico que se ha dado cuenta. Asunçao sigue sin gustarme pero es lo menos gravoso que tenemos en el equipo para destruir. Lástima que no se prodigue en el pase largo y recurra tanto a las faltas (es el que más tarjetas tiene, el que más faltas comete. Muchas de ellas innecesarias). La banda con Reyes ha ganado muchos enteros, ahora falta algo de competencia para Simao con el fin de que se ponga las pilas como está teniendo que hacer el bueno de Maxi. Delante las cosas no funcionan aún como la temporada pasada, pero las dos últimas victorias dan un respiro al argentino y al uruguayo y contribuirán a quitarse de encima el estrés, la responsabilidad y las ganas frustradas de marcar. Ayer metió uno cada uno, pero Reyes estuvo a puntito, Forlán también pudo colar otro y el Kun desperdició otro par de oportunidades.
Sigue fallando la defensa, aunque se nota menos. Y Asenjo, lejos de la excelente temporada que hizo en Pucela, ayer sacó un par de manos que, supongo, dieron confianza y mucha paz a la zaga y al equipo.
Sólo han sido tres puntos ante el colista. Un colista que venía de enfrentarse el miércoles al líder. Tres puntos que sirven para respirar y salir de la zona de descenso, para mirar hacia arriba en lugar de hacia abajo. Es la primera victoria fuera de casa, la segunda victoria consecutiva. Que nadie se engañe, seguimos en estado crítico aunque ayer la terapia jerezana sirviese para que los nuestros no olviden que el equipo está hecho para ganar.
Y ahora, a olvidarse del Oporto el martes inmaculado (habrá que ir a ver el último partido de Champions) y a pensar en el Villarreal -que anda en la misma senda que nosotros- para conseguir los tres puntos en el Calderón y aprender bien la lección: este equipo es un equipo ganador.

La Copa (cómo me gusta la Copa) será el camino para llegar a Europa. Ojo con el Recre que ya nos ha eliminado alguna vez no hace tanto.

Vamos, Atleti, vamos.

martes, 1 de diciembre de 2009

Lo siento Quico



Atleti 4 - Espanyol 0

Quico Prat, ya lo he dicho en alguna otra ocasión, es un buen amigo que fundó la Peña Españolista de Madrid. Siempre que nos enfrentamos a los pericos nos ponemos en contacto para preparar el choque y tratamos de verlo juntos -aunque nunca coincidimos-. Esta vez yo andaba por Cantabria (donde aún sigo) y me tuve que conformar con ver los cuatro golazos y las múltiples ocasiones de los nuestros en un bar desangelado donde me cené un pincho de tortilla (increíble pero no tenían nada más de comer) junto a uno de mis compañeros de viaje, el técnico de sonido, que también es colchonero de pro.

Llegué quince minutos tarde al bar por culpa de una reunión interminable, pero una vez metido en harina, y temiendo el centrocampismo del que me había avisado la radio, traté de tranquilizarme y prepararme para lo que viene siendo habitual. Es decir, nada. La sorpresa fue de lo más agradable, y no sólo por el resultado, que también, sino porque vi a un Atleti ofensivo, con ganas de morder, peleón, igual de blando y descoordinado en defensa, pero con mucha hambre de gol, especialmente encarnada en el Kun, pero con la colaboración inestimable de Reyes, las subidas peligrosas de Ufjalusi, un Jurado que hacía circular el balón y Simao y Forlán (lejos de su mejor versión) pero con ganas, sin quedarse a ver la pelota pasar.

Lo del Kun ya lo hemos dicho muchas veces. Creo que él y Torres son lo mejor que han pasado por el Calderón en la última década. Tíos que inventan, que hacen cosas distintas, que pelean, capaces de marcar el ritmo del partido y de meterse un sprint con toda la fuerza de una locomotora en el minuto 90 desbordando a tres contrarios para regalar un gol a un compañero que está saliendo de la depresión. Para quitarse el sombrero.

Me temo que en enero volverán los tira y afloja del Chelsea y de todos los clubs poderosos para dejar unos millones de euros en los bolsillos de los que se apropiaron indebidamente del Atleti y que seguiremos en la misma mediocridad que en los últimos 16 años. Para llorar.

Sigo empeñado en que este año la Copa tiene que ser nuestro objetivo prioritario. Ganar un título que nos dé entrada a Europa el próximo año. Mientras esto sucede iré el día de la Inmaculada a ver nuestra despedida de la Champions contra los portugueses y pagaré a ONO los 12 euros de vellón para seguir en directo el partido contra el  Xerez que nos ayude a seguir sumando, que falta nos hace.

Vamos, Atleti, vamos.

sábado, 28 de noviembre de 2009

Los quintos en la liga chipriota




Appoel de Nicosia (Ojo, Chipre) 1 - Atleti 1 (y gracias)

Nuestro paso por la Champions está siendo de lo más desastroso. Si el año pasado nos despedíamos de la gran competición europea invictos (increíble pero cierto), este año nos iremos sin ganar un solo partido. Y hemos jugado dos contra un equipo de Chipre (sí, una isla europea en el Mediterráneo remoto). Pero lo más increíble es que este equipo va el quinto en la liga de su minúsculo país sin tradición futbolística. ¡El quinto! Vamos, que sería el equivalente al filial del Alcorcón, a un Tercera español.
El cachondo de Quique Sánchez Flowers ha dicho que lo importante era puntuar para depender de nosotros mismos pensando en el acceso a la UEFA, o a la Liga de Europa o como coño se llame ahora esa competición que anhelamos y necesitamos como el comer.

Sorpresa en Sevilla

Yo estoy un poco hasta los huevos del equipo. Creo que salvaremos la categoría, pero da tanta pena, tanta rabia y tanta vergüenza verles jugar, que lo único que me ha aliviado esta semana es haberme encontrado una tasca en Sevilla (sí, como lo lees, en Sevilla) donde el camarero llevaba al cuello una cadenota de oro con el escudo de mi Atleti y tenía la estantería del coñac y el anís del Mono decorada con vírgenes y cristos variados trufados con pegatinas de nuestro escudo y un banderín del equipo de mis amores. Le pregunté cómo era posible que fuera del Atleti un sevillano. Respuesta: "Yo nací en Legazpi y me crié en el puente de Segovia. Soy de Madrid, y soy del equipo de mi ciudad". Ole, ole  y ole.
Sin duda lo mejor del Atleti desde que ha comenzado la temporada.


Mañana me voy a Cantabria. No estaré en el Calderón ante los pericos. A ver si tengo suerte y encuentro otro garito del Atleti en Santander. Es mi única ilusión. Qué triste, ¿que no?

Venga, Atleti, coño.

domingo, 22 de noviembre de 2009

Aún estamos a tiempo



Depor 2 - Atleti 1

- Llevamos 11 jornadas de 36.
- Llevamos 7 puntos de 33.
- Estamos en descenso.
- Eliminados de la Champions.
- Ya hemos cambiado de entrenador.
- Y lo que es peor... el equipo está triste y un poquito desquiciado.

Ahora es cuando se tiene que notar que somos mucho más que un equipo de fútbol. Ahora es cuando hay que apoyar al equipo (sin olvidar que los que se lo apropiaron indebidamente están haciendo una gestión calamitosa). Ahora es cuando tenemos que estar más unidos. Y es ahora el momento porque aún estamos a tiempo.

Entrar en una dinámica perdedora sólo lleva a que ningún equipo te respete, a que todos se lamenten de ti, a que cualquiera aproveche para hacer leña del árbol caído. Y da un poco de miedo. Yo miro hacia atrás y veo ahí mismo el descenso a segunda del que no nos gusta hablar. Y me acuerdo del partido en el Carlos Tartiere, de la lluvia, de Hasselbaink fallando un penalti, de la absoluta desesperación. Y luego dos años de fútbol plata, y los partidos por la mañana... que no, que estamos a tiempo, que hay que animar a estos tíos, que el equipo tiene que salir de ahí.

Penaltis
Nada que objetar a la derrota de ayer. El Depor fue mucho mejor. No podemos echarnos atrás cuando nos ponemos por delante en el minuto 4. Hay que seguir jugando, tener ambición. Pero cuando el equipo está acojonado, hasta el empate a uno le parecía un buen resultado. 
Los penaltis nos favorecieron. Sí, quizá alargar hasta el minuto 96 fue un exceso (que lo fue), pero el penalti existió (Pablo, again), igual que nos libramos de otro por un fuera de juego -dudoso porque la da uno de los nuestros- y lo mismo que el que acabó con tarjeta para Ricky. Vamos, que ningún pero al juego del Depor y todos a los del Atleti. 

Si no me fallan las cuentas Quique sólo ha ganado al Marbella desde que llegó. Esperemos que el domingo podamos respirar frente al Espanyol. Yo estaré en Cantabria pero seguro que habrá alguien en mi sitio para animar y tratar de escapar del hoyo. Aún estamos a tiempo.

miércoles, 11 de noviembre de 2009

...y yo me lo perdí


Atleti 6 - Marbella 0
El horario no era muy bueno para mí, aunque he de reconocer que es la mejor hora para un día laborable de invierno. Si nos lo ponen a las 22:00, aunque hubiera podido, fijo que no voy. Pero la vida es así. Y aunque yo soy de los que aman la Copa y disfrutan de este torneo más que de ningún otro, me fue imposible acudir al Calderón (con ganas -y muchas- me quedé), sobre todo cuando al poner la radio del coche -una vez terminada la reunión- oigo que vamos 4-0 en la primera parte. Ya digo, a punto estuve de presentarme allí a ver los otros dos goles de Maxi, los tiros al poste, los penaltis no pitados, los primeros minutos de Camacho, el rodaje de Domínguez y los 50.000 asientos vacíos que motivaron al Atleti mucho más que el llenazo contra los de la otra acera. Por cierto, eliminados ante otro 2ªB. Nosotros, al nuestro, le metimos 8-0, ellos perdieron 1-4. Cada vez entiendo menos de esto.

Al llegar a casa me tomé un café en el bar del barrio donde televisaban al Atleti en la tele pequeña y dejaban la grande para el desastre vikingo. Me subí a mi sofá. Estuve zappeando hasta que en la TV3 de los catalanes encontré el único programa deportivo con información subtitulada cada vez que metían un gol. Me enchufé los cascos de la radio y veía imágenes absurdas. Al final del partido, los de La Sexta me pusieron un mega-resumen con la cagada de Pablo en el minuto 1. Nos llegan a meter ese (no entiendo cómo lo pudo fallar el delantero malagueño) y se nos hubieran complicado mucho las cosas. Somos así.

Luego vinieron los goles, con rebotes que favorecen al Atleti, con un Sinama que ¡por fin! metió un golito recogiendo el balonazo que Jurado hizo rebotar en los dos postes. Con Maxi como en sus mejores tiempos y sin necesidad de Forlán ni el Kun (esto es lo mejor) para meterle un set a un equipo de 2ªB.

Me encanta la Copa, sí. Lo vengo diciendo desde que tengo conciencia de blog. Me encanta porque los pequeños pueden tener su momento de gloria, porque hacen que este espectáculo mire a sus orígenes, a las raíces, al deporte. Y me enamora cuando un equipo humilde, con un presupuesto equivalente al sueldo anual del jugador peor pagado de la plantilla de enfrente, es capaz de eliminarles ante un estadio repleto dedicado a pitar a los suyos. Sí. Viva la Copa, coño.

Ahora a descansar estos diez días para coger fuerzas, ánimo, moral... para que Asenjo entrene las salidas, para que Pablo y Perea ensayen las cesiones y aprendan a no regatear en el borde del área, para que los córners de Simao lleguen más allá del primer palo, para que Raúl García ensaye algún tiro desde fuera del área que vaya entre los tres palos... vamos, que no van a tener tiempo para aburrirse.

Luego tenemos que comernos al Depor en Coruña, al Espanyol en el Calderón y al Xerez en Chapín. Si no salimos pronto de ahí abajo, después nos costará salir muchísimo más.

Vamos, Atleti, vamos.

domingo, 8 de noviembre de 2009

Ni equipo, ni árbitro, ni afición


Atleti 2 - Vikingos 3

Aún estoy rabioso. Llevaba nervioso desde que empatamos in extremis al Chelsea con un juego voraz, con presión, con fuerza y determinación. Ayer, sábado, mi mujer se levantó revuelta y suspendimos el viaje previsto a Sestao para ver a la familia política. Todo se ponía de cara, estaría presente en el derbi con mis hermanos. Durante todo el día las llamadas de teléfono se sucedían para ver quién llevaba el postre, cómo quedábamos, si el bocata sería especial... nervios, ansiedad y muchas ganas de revancha.
Finalmente mi hermana decide llevar el coche y salir a las ocho de la tarde para encontrar aparcamiento. Una hora y cuarto dando vueltas y peleándonos con los "munipas" madridistas a los que les dio por no dejarnos aparcar donde siempre. Mal augurio. Llamamos a mi hermano y mi sobrino y nos cuentan que vienen en metro, que les han robado la batería y el asiento de la moto en el garage. Las cosas se ponen aún peor.

Ni equipo
El campo está a rebosar, como siempre que viene el Madrid a robarnos a casa. Los del Frente Atlético habían preparado un tifo con banderas. Nos tocan las rojas, pero un gilipollas con entrada y bufanda recién estrenada se las ha llevado y nos ha dejado las blancas. En fin, que el tifo va a salir mal en nuestro lado. Menos mal que los chicos del Frente están atentos y, antes de que salgan los jugadores, nos piden las banderas blancas para llevarlas a su sitio. Esto no empieza bien.
Mis vecinos de abono, después de dos semanas sin aparecer dicen que si nos marcan antes del minuto cinco, ellos se piran. Minuto 4, Sergio Ramos hace una falta clarísima a Cléber Santana, le llega el balón a Kaká y mete un misil que deja a Asenjo con una estirada para la foto."No os vayáis, que remontamos", les digo. Y me hacen caso. Lo cierto es que el Atleti estaba penoso, sin fuerza, sin agresividad, con un Madrid hinchándose a dar patadas. Con entradas de esas que te ponen la carne de gallina, como la de Sergio Ramos nada más empezar, la de Lass sobre Jurado, por detrás y a media altura, la de Garay, la de Pepe, la de Kaká... unos cerdos, vamos. Y los Ultra Sur coreando con oles los pases de los suyos mientras el Calderón asiste alucinado, en silencio y avergonzado a un humillante espectáculo cuando Marcelo había marcado el 0-2  ante un despiste de la defensa y con la colaboración de un Asenjo absolutamente dubitativo y muy mal colocado. Miedoso en las salidas, sin ninguna seguridad bajo palos. Fin de la primera parte. Para echarse a llorar.

Ni árbitro
Lo de Clos Gómez no tiene nombre. Aunque es peor lo del Marca, donde escriben que su arbitraje fue impecable. Creo que el fulano que escribe esto no estuvo en el Calderón o es colega del menda este o -lo que es más seguro- es un madridista que escribe sobre los árbitros que favorecen a los suyos.
En el primer gol del Madrid hay una falta clarísima del intelectual Sergio Ramos a Cléber Santana. Deja seguir y Kaká marca. La primera entrada de Sergio Ramos en defensa es una tarjeta amarilla que se queda sin sancionar. Los jugadores del Madrid entraban con tal violencia que vimos a Jurado volar dos metros tras una entrada por detrás a la altura de la cintura por parte de Lass que sólo vio una tarjeta amarilla. Luego se comió un penalti clarísimo por empujón a Jurado en el último minuto de la primera parte, y una mano de libro en la segunda parte. Para rematar, anuló el tercer gol del Atleti cuando Ufjalusi recibe en posición correcta. Pero no estábamos para protestar. En el Calderón sabemos que hay cuando viene el Madrid ellos juegan con 12 y no queda otra que seguir adelante.


Ni afición
Con el 0-3 que regaló Perea a Higuaín (Asenjo pudo hacer algo más, como en casi todos los goles que nos cascan, pero el mérito fue de Perea), gran parte de la afición empezó a desfilar. Comenzaron los gritos de "jugadores mercenarios", "échale huevos" y demás gilipolleces que los aficionados madridistas jaleaban entre risas poniendo la cosa peor de lo que ya estaba. Luego vino el gol de Forlán (¿qué le pasa al Cachavacha este año? ¿Por qué está tan flojo y desacertado? Se pasa el partido pidiendo disculpas a sus compañeros porque no llega, porque falla el control, porque la pega mordida...). Apenas se celebró, pero maquillaba el resultado. Y cuando el Kun marcó el suyo... ahí el campo se vino arriba y pensé "si meten el tercero, nosotros metemos el cuarto". Pero San Iker volvió a repetir ante el Kun lo que antes le había hecho a Simao, otro poste como el de la primera parte, Simao que empalma una volea ansiosa al segundo anfiteatro cuando estaba solo y el gol anulado. Era demasiado tarde, princesa. El Atleti esperó al minuto 75 para empezar a jugar. Y darle tres goles de ventaja al Madrid, es demasiado.

Al final se queda un sabor de boca amargo. De lo que pudo pasar y no pasó, de que se repita la misma historia, de un equipo sin sangre ni presión que, tras la expulsión de Ramos y la salida del Kun, resucita de sus cenizas sin llegar a nada... de que estamos en descenso, de que sólo hemos ganado un partido de diez y de que esto tiene que cambiar pronto.

Ahora a pasar de ronda en Copa con el Marbella y a pensar en los tres puntos de Coruña, en los del Espanyol y en los de Xerez. A ver si se cumple el vaticinio de Quique y estamos entre los siete primeros antes de Navidad. Aunque quizá eso vaya en su contra y los Reyes Magos no le traigan los jugadores que necesitamos para darle la vuelta a este despropósito.

miércoles, 4 de noviembre de 2009

Solomillo con foie y trufa negra


Atleti 2 - Chelsea 2

Ayer estuve de cena en un maravilloso restaurante italiano mientras mi equipo se despedía honrosamente de la Champions. Me había prometido que si no ganábamos al Athletic en Liga, no iría al Calderón en Champions. Y así fue. Pero mi sitio no se quedó vacío. Allí estaba mi sobrino con su padre (mi hermano) supliéndome, animando sin descanso y llamándome por teléfono cada vez que sucedía algo. Y el teléfono no paró de sonar. Mira que me lo advirtió el carabanchelero Tomi Soprano. No escarmiento.

Taxi
Pillo un taxi cuando aún vamos empatados a cero en la primera parte. Los vikingos marcan y apago Onda Cero porque el taxista me lleva la Ser a toda pastilla (al menos no tenía enchufada la Cope, o Esradio). Creo que un tal Benzemá es el que se la mete al anciano guardameta rosonero. Reyes se está saliendo. Penalti contra el trampas. Poli Rincón se vuelve loco porque dice que no ha sido. Ronaldinho se la endiña a Iker. Pablo Ibáñez está soberbio en defensa. Gol del Milán. Doy un bote en el asiento trasero del taxi y el conductor me mira por el retrovisor y no dice nada. Se ha percatado de que soy colchonero. Lo anulan. "Ha sido un gol legal -comentan en la radio- pero lo ha anulado para compensar el penalti duduso". Y pienso en el sábado contra los vikingos en el Calderón, en los calamitosos arbitrajes que sufrimos en casa contra ellos, en los diez años que llevamos sin ganarles, en los puestos de descenso, en el Kun chupando banquillo, en el capullo del portero del Chelsea que saca una mano imposible a un remate espléndido de un Reyes resucitado. "Son 16,50" me suelta el taxista al llegar a la puerta del céntrico restaurante madrileño.

Burrata y Gorgonzola
En el descanso, ya dentro del lujo italiano en el que me han citado, saludo a mis compañeros de mesa e informo sobre el 0-0 del Atleti. Un camarero me pregunta por el resultado del Madrid y le respondo que no sigo a ese equipo, aunque creo que está jugando en Milán y que, como él es italiano, espero que pierda. Me sonríe de modo torcido haciéndome ver que es un pobre vikingo. Peor para él.
Excelente la Burrata, maravilloso el Gorgonzola, estupendísima la mortadela con pistachos. Muy buenos los entrantes que degustamos durante el descanso. Empieza la segunda parte y mi cabeza intenta no perder el hilo de la conversación mientras mi corazón palpita a través del de mi hermano y mi sobrino con otros 40.000 en el Calderón. Suena el teléfono por primera vez.

Solomillo con foie y trufa negra
"Gol, gol, gol, menudo gol del Kun. 1-0, tío; cómo están jugando. Hay equipo. Esto es otra cosa. Pero ¿cuándo han aprendido? Si hasta Cléber Santana está correcto, no pierden un pase y Reyes está alucinante", me suelta mi hermano de carrerilla. De fondo oigo a mi sobrino gritar como loco un "Atleeeeeeeti, Atleeeeeeti" que me pone la carne de gallina y hace que me asomen las primeras humedades a los ojos. "Joder, Santi, pues sí que te está gustando la burrata", apunta un compañero de mesa. "La verdad es que sí, pero me está gustando más el Atleti, vamos 1-0".
Al poco rato vuelve a sonar el móvil. "¿Otro gol? comenta el estirado camarero italiano que simpatiza con los merengues". Le miro y contesto en voz baja: "¿Qué ha pasado? ¿Hemos vuelto a marcar?" Mi hermano me da la mala noticia con voz clara: "Drogba. Nos ha ganado la partida. Es buenísimo este negro. Espera que no nos marque otro. Pero el Atleti está muy bien. Podemos ganar".
Viene el camarero con mi plato principal cuando vuelve a sonar mi móvil: "¿El solomillo era para usted?" Su pregunta se simultanea con el segundo gol de Drogba que temía mi hermano. "Sí, es para mí, pero ya no me apetece, gracias". De todas formas me lo deja al tiempo que mi hermano me dice que faltan tres minutos, que todo puede pasar y que ya no me llama hasta que acabe el partido.
Empiezo a atacar tímidamente el plato cuando suena el móvil inmediatamente: "Gooooool, gooooool. De falta. Ha sido Jurado. Menudo golazo. Empate, tío, empate. ¿Cómo dices? Ah, no, que no ha sido Jurado, que ha metido otra vez el Kun. Alucinante. Qué partidazo. Gracias tío, y no vengas el sábado que eres gafe". Me cuelga mi sobrino, imagino los cánticos del "Te quiero Atleti" y la sonrisa delata mi estado de ánimo, tanto que me metí el solomillo, un souflé de chocolate, un expresso, un limoncello y acabé brindando con un margarita en el garito de Sabina mientras espero que salga su último disco. Por cierto, estaba pintado en la pared Hugo Sánchez vestido del Atleti.

Gracias, Atleti, gracias.

domingo, 1 de noviembre de 2009

Cada vez más pequeños


Athletic 1 - Atleti 0

Más y más pequeños. Ni con Abel, ni con Santi, ni con Quique. El Atleti no atina con la portería y el gol pasa de sueño a pesadilla. Ayer, tres postes en San Mamés. Lo cierto es que en la segunda mitad merecimos dar la vuelta al marcador. Pero si no hay fe, si el equipo no cree en sí mismo, de nada sirven las tácticas, las presiones, las ganas de querer salir. No es suficiente con querer, hay que creer realmente en que podemos. Y este equipo, a día de hoy, sigue sin fe.
La primera parte, después del primer palo de Maxi y el imposible remate del Kun en el rebote, fue absolutamene bilbaína. Tras el gol a balón parado (uno más) el Athletic presionó y presionó hasta dejarnos absolutamente desarmados, desarbolados, buscando el sitio, buscando el balón, buscando a los leones que no paraban de correr y correr. Menos mal que los de Bilbao no supieron rematar con su falta de acierto en los metros finales (pensaba yo, ilusio de mí, cuando llegamos al descanso). En la segunda parte no podrían mantener ese ritmo que había acabado con la maquinaria de Toquero por sobreesfuerzo.
Y así fue, pero no del todo. En la segunda mitad el equipo volvió a retomar el fútbol de los primeros 15 minutos de partido. Orden, todos juntitos, defensa contundente y bandas. Fueron más de seis las ocasiones de gol que creamos en esta fase del partido, incluyendo los dos espectaculares disparos desde fuera del área que Forlán y Agüero estrellaron en la base del poste y la cruceta respectivamente.
La Virgen de Begoña, la de Aranzazu y todas las vírgenes conjuradas en la noche de los muertos, se pusieron del lado vasco. A nosotros no nos queda otra que asumir la jibarización del equipo. Sabernos pequeños y comenzar a crecer (menguar más, me temo, es imposible).
Por de pronto, el martes, contra el Chelsea, no voy a ir al campo. Estoy jodido, triste, con ganas de que todo esto cambie, de que se vayan Gil y Cerezo, de que el Atleti vuelva a ser un equipo con fuerza y capacidad de arrastre. Todo esto es tan gris, tan pobre, tan ruin y tan decadente, que si seguimos así el próximo año veremos los partidos de liga los domingos a las 12 del mediodía. O sea, en Segunda.
Estamos a tiempo.


Vamos, Atleti.

miércoles, 28 de octubre de 2009

Marbella, qué tiempos

Marbella 0 - Atleti 2
La Copa, siempre lo he dicho, es una competición que me encanta. El año pasado, a pesar del Barça todopoderoso, la tuvimos muy cerca y no supimos aprovecharla y apostar por ella. Esperemos que Quique S. Flowers y los asalariados que visten la rojiblanca, se lo tomen este año en serio. Por de pronto hemos comenzado ganando en Marbella, una ciudad de infausto recuerdo por su relación con la familia Gil, con la intervención judicial, con los chanchullos publicitarios y con toda la porquería que envolvió (y sigue envolviendo) las altas esferas del club, el lugar podrido en el que se encuentran los propietarios y máximos accionistas que indebidamente se apropiaron de nuestros sentimientos.

Lo cierto es que ayer ganamos dos cero. El primero lo metió en propia meta un tal Troyano, auténtico virus para su equipo. El segundo lo anotó Maxi, que falta le hacía para recuperar la confianza. Una confianza que aún está a años luz de Sinama "Singol". El francés está obsesionado con no marcar. Lanzó una al palo nada más comenzar cuando lo fácil era marcar. Falló otras dos ocasiones sencillas porque se empeña en controlar el balón en el área pequeña cuando lo suyo es rematar de primeras... en fin, que Sinama no está fino.

Todo lo contrario que Reyes (que salió de inicio, al igual que Asenjo, Cléber y Jurado). El gitano está decidido a triunfar en el Atleti (a ver si es verdad) y Quique S. Flowers ha depositado su confianza en él. Al final le tuvo que quitar porque los marbellíes quisieron cambiar la dinámica del partido involucrando al Atleti en el juego sucio y en provocar para romper el partido. El utrerano tenía una tarjeta y Quique optó por no arriesgar dando salida a Simao que sirvió el segundo en bandeja a Maxi en la recta final.

El Kun salió por Sinama y tampoco.

Parece que los dieciseisavos los tenemos pasados. Aunque falta la vuelta en el Calderón.

Forza Atleti.

domingo, 25 de octubre de 2009

Santi vete ya


Atleti 1 - Mallorca 1

Lo mejor del partido, sin duda, el cántico escuchado dos filas de asientos más arriba. "Santi vete ya, Santi vete ya, Santi vete yaaaaaa". El cachondo en cuestión hacía chanza de la efímera estancia de Santi Denia en un banquillo desde el que quiso pasar a la historia cambiando de portero, dejando a Jurado en el banquillo y apostando por Domínguez. A mí, dicho sea de paso, me gustó mucho la alineación con Domínguez y De Gea; aunque hubiese sacado a Jurado y a Reyes desde el principio para que Asunçao y Maxi calentaran en la banda. Lo de Forlán y el Kun ya se sabe, este año aún no han cogido el punto sobrehumano de la temporada pasada. Quizá convendría poner a Sinama en punta (que es su sitio) para dar descanso al pequeño argentino.

Pues eso, que el irónico cántico del abonado del segundo anfiteatro me llevó a reflexionar sobre mi estancia en el Vicente Calderón. Sí, cierto que estuve con mi sobrino y que, aunque mis hermanos no pudieron ir, es una alegría encontrarse con la familia. Pero con esa tarde de sol y buen tiempo, con un cielo otoñal digno de postal, con mi chica embarazadísima en casa, con un montón de libros por leer, de pelis que ver, de conversaciones que continuar... qué mierdas hago yo viendo a una panda de sinvergüenzas arrastrándose por el césped, huyendo de la pelota y asegurando el pase al pie sin lanzarla más allá de cinco metros. Y el tipo de detrás que insiste: "Santi vete ya, Santi vete ya..." Mi amigo Evaristo, Atlético de los de toda la vida y llegado desde Salamanca para ver el espectáculo me dice que lo mejor es que nos vayamos. Y yo, erre que erre, que no, que nunca se sabe, que en la segunda parte nos van a sorprender, que cuando salgan Jurado y Reyes esto puede ser otro partido. Y vaya que si lo fue.

En la segunda parte sale Jurado desde la caseta. Otra mano, otro penalti, otro "u-ru-gua-yo, u-ru-gua-yo". Evaristo que se tapa los ojos con la chaqueta, mi sobrino que se pone de pie y aprieta la gorra en sus manos contra los dientes. De pronto me desconecto, miro a mi alrededor  y veo a 40.000 personas en vilo, con el corazón a punto de pararse, esperando que Forlán meta el segundo penalti de la tarde que nos haga jugar con ventaja en el marcador y con dos jugadores más en el campo. GOL. Entró. Evaristo sonríe, mi sobrino se me abraza, gritamos un poco pero: no hay cántico de celebración. No hay bufanda estirada sobre las cabezas con el atronador "Atleeeeeee-ti, Atleeeeeeee-ti". Algo no va bien.


En broma le comento a mi sobrino que ahora Santi meterá a Cleber para sujetar el partido y contener a los nueve del Mallorca. Dicho y hecho. Mi tocayo no se da cuenta de que estoy de coña, como el fulano de arriba que insiste con el "Santi vete ya, Santi vete ya...". Ahora empiezo a pensar que me lo está cantando a mí. Y no le falta razón. Y me entran ganas de hacerle caso. Y mi sobrino que deja de animar como el Frente Atlético la primera parte. Evaristo, experto en el Atleti desde los tiempos del Metropolitano, me dice que pinta mal. Yo hago de Rappel y profetizo que "el calvo" (Borja) nos va a empatar porque está hiperactivo y el negro (Webó) no puede con su nombre de la paliza que se ha metido. Aún así remata de cabeza rozando el larguero en una cantada de De Gea por alto.

El partido está acabado. Minuto 90. Todos pidiendo la hora en el Calderón, contra el Mallorca, contra nueve jugadores, ganando 1-0... y nos marcan un gol absurdo en un fallo defensivo habitual con la colaboración del joven guardameta al que yo tanto he defendido aquí. "Tío, el calvo" confirma mi sobrino. El campo se enfurece, entra en cólera, se mezclan y se solapan los gritos y cánticos de queja, de insulto de desesperación. El árbitro pita el final. Todos a casa a rumiar el desastre. Me llaman mis hermanos. Lo rumiamos juntos. No llegamos a ninguna conclusión. "Santi vete ya, Santi vete ya, Santi vete yaaaaa" resuena en mi cabeza durante toda la noche.


El martes comenzamos en la COPA (mira que me gusta a mí la Copa) contra el Marbella. No sé si se me habrá pasado ya el estado depresivo rojiblanco en el que me encuentro.

Somos nosotros, Atleti, somos nosotros.

 

jueves, 22 de octubre de 2009

Defensa en zona, o algo



Chelsea 4 - Atleti 0 (again)

Lo decía mi hermano el domingo contra Osasuna, lo escribía el Tomi en su blog, lo vemos en el Calderón en cada partido convertido en suplicio defensivo. Todos muy bien colocaditos atrás, como en un futbolín, cubriendo su zona y olvidándose de los contrarios que, como es lógico, saben de nuestra ineficacia con esta defensa zonal y nos abren las carnes. Exactamente igual que el año pasado. La única diferencia es que antes metíamos todo lo que tirábamos a puerta. Forlán, Agüero y compañía no están tan enrachados como la temporada pasada y, claro, esto se nota en la falta de resultados y deja al descubierto que el equipo no tiene un sistema adecuado.
Lo peor de todo es que ayer oía a Alejandro Mori (que sabe un rato del Atleti aunque sea un poco pelota con los dueños y suavice sus críticas con el "genio" Pitarch) y decía el periodista deportivo que Abel no va a cambiar nunca su defensa en zona, que eso es INNEGOCIABLE. Pues vale, Abel, pírate un rato y vete a bajar a otro Levante a Segunda, o a mantener al Castellón en mitad de la tabla de Segunda. ¿Acaso hemos fichado al de Velada para que hagamos una temporada aseada en la división de plata? ¿Quieren los dueños-ladrones que baje el equipo para malvenderlo y seguir forrándose el riñón?
El sábado, a las 18:00 contra el Mallorca de moda, a ver qué nos ofrecen en el Calderón. Tiene tan buena pinta que no dejaré de ir.
Vamos, Atleti.

lunes, 19 de octubre de 2009

Empaquetados para Stanford Bridge


Osasuna 3 - Atleti 0 (patatero)

Desde que he regresado de Madagascar todo han sido malas noticias. Mi mujer tiene el azúcar por las nubes y el embarazo se quiere complicar, mi hermana sufrió un atraco por parte de un malnacido que le provocó principio de estrangulamiento, mi madre ha estado ingresada con un misterioso mal que los médicos aún no han sabido bautizar, la hija pequeña de un buen amigo se cayó y ha estado en observación con fractura craneal, la mayor de otro gran amigo tiene el puñetero papiloma uterino... de modo que el Atleti era lo que menos me preocupaba ayer, mientras recuperaba fuerzas de mi periplo africano y trataba de poner en orden mis correos electrónicos, mi vida, mi quehacer diario.
Vamos, que ni vi el partido ni lo oí por la radio. 
Sin embargo, el jodido Atleti me tiene tan comida la moral que no pude resistir la tentación y llamé (uno a uno) a mis cinco hermanos para que me comentaran en directo la actualidad de los nuestros que estaban retransmitiendo por el Canal Plus que no tengo desde el Reyno de Navarra. Recojo aquí sus impresiones aún a riesgo de repetirme:
- "Es increíble. Como sigan defendiendo en zona nos meten otros tres. Qué coladero, chico".
- "Agüero está fundido. Y el sinvergüenza de Abel no tiene lo que hay que tener para sentarle y sacar a alguien que esté más inspirado... pero, claro, ¿a quién saca? ¿a Reyes?"
- "¿Cómo es que el portero de Osasuna no es internacional? Se lo está parando todo. Eso sí, tampoco es que se lo pongan muy complicado".
- "Han quitado a Simao y no me había dado cuenta ni de que estaba en el once titular... manda muchos huevos".

Y así sucesivamente. Lo mejor será que olvidemos cuanto antes lo de ayer y pensemos con fe (si es que nos queda algo) en el milagro ante el Chelsea. Y de estos tíos me creo todo, de modo que si ganamos haré como que no me sorprendo.


Agradecimientos
Durante mis 18 días por la gran isla africana de Madagascar el Atleti ha jugado un partido de Liga y otro de Champions. Aunque hemos estado muchos días sin agua corriente, sin luz eléctrica, sin cobertura de móvil y, por supuesto, sin internet, mis hermanos, sobrino y amigos, me han ido enviando mensajes con toda la información de lo que acontecía contra el Zaragoza y contra el Oporto en tiempo real. Gracias por hacerme sentir tan cerca de España, de vosotros y del Atleti. 
Me llegaron todos el mismo día. Me sirvieron para animarme en momentos de duro trabajo. El Atleti, es lo que tiene, que aún perdiendo contra el Oporto y sufriendo contra el Zaragoza en casa, siempre te da alegrías.

Vamos, Atleti, vamos. 

 



jueves, 24 de septiembre de 2009

Poco nervio, muchos nervios



Atleti 2 - Almería 2

Ayer el día comenzaba con problemas. Los de la cárcel de Valdemoro no acababan de darnos el permiso para grabar al día siguiente (o sea, hoy). Mi jefe sufría un pinzamiento y me comunicaba que debía suplirle en el viaje a Madagascar, que fuera preparando la maleta porque el sábado volaba a la inmensa isla roja africana. Mi mujer seguía con un catarro que se suma a los cinco meses de gestación y mi padre andaba con un tobillo metido en hielo para aliviar un golpe en la pierna... vamos, un día complicado.
A todo esto me llama mi hermano el pequeño y me dice que no se puede pasar a recogerme en la moto porque se le ha roto el casco y, para colmo, se ha cargado un grifo de su casa y está que echa pestes por los cuatro costados.
Al final, cojo mi coche y me encuentro en el campo con mi hermano (el del casco y el grifo roto); mi otro hermano, y su hijo -o sea, mi sobrino- con la mochila repleta de bocatas de tortilla de patata cocinada expresamente por nuestra madre -y abuela- para el partido contra el Almería. "Si no vemos fútbol, al menos cenamos bien", pensamos los cuatro previendo lo que se nos venía encima.

Sin nervio
Cuando en tu propio campo el equipo rival comienza acosándote y haciéndote un par de ocasiones de gol... la cosa es para cabrearse. Incluso más que si el propio Forlán falla un penalti que él mismo se fabricó tirando de experiencia. Al equipo le falta nervio, un poco de ambición, creerse que son capaces de comerse a cualquiera, salir con ganas de morder al contrario, de comerse el campo, de acogotar al contrario. Nada de eso. Todos los equipos que vienen al Calderón lo hacen sabiendo que se nos pueden merendar, sin miedo, sin complejos, con los tres puntos casi seguros. De hecho, ayer el Almería se dejó dos en el Manzanares porque no acababan de creer que fuera tan sencillo.

Con nervios
El portero, por falta de partidos y los cinco del Nou Camp, salió con nervios. Hasta dejó salir un balón fuera cuando lo normal era cogerlo y espolear al equipo sin perder tiempo. Y eso que le aplaudimos.
La defensa como un flan. Unos mirándose a otros. Todos pendientes de no ser ellos los que cometan el error, quitándose la responsabilidad de encima alejándose de la jugada del peligro contrario. Con una oreja puesta en la grada y sin dejar de mirar al banquillo para ver si hay gestos de aprobación.
El centro del campo absolutamente desquiciado, tembloroso, sin nadie que se atreva a echarse el equipo a las costillas, con pases de medio metro, con quítame de aquí este marrón que yo no he sido. Con las bandas metidas en el círculo central y haciendo un esfuerzo por correr con las piernas completamente rígidas y el cerebro agarrotado.
Los delanteros tirando desde cualquier sitio o regateando hasta la extenuación. Sin ideas, sin remate rápido. Abducidos por una histeria invisible que, al final, se contagia a la grada (y viceversa).

"Mala racha"
El ladrón con sentencia firme por apropiación indebida que preside el club, Cerezo, dijo que era una mala racha. Menos mal. El día del Barsa era "mala suerte". No sé si sabrá o no de fútbol el ínclito elemento, de lo que sí sabe es de echarle morro a la vida... y ahí está, tan pancho, con el Atleti que se ha quedado para su uso particular y vendiéndonos motos todos los días.
Lo de Valencia espero que no lo defina como "unos errores puntuales". En fin.

Yo no me resigno. Sigo creyendo en el equipo. Y aunque no ganemos un partido, ahí estaré para animar y tratar de sacar esto adelante. Bueno, estaré en la distancia. El sábado, después del partido contra el Valencia me piro a Madagascar medio mes. Seguiré desde allí, con mi camiseta y mi corazón rojiblanco, la recuperación de los nuestros.

Aupa Atleti.

domingo, 20 de septiembre de 2009

Mejor que el año pasado


Barsa 5 - Atleti 2

Imbatidos en Champions. Le marcamos dos goles al Barsa en su casa rompiendo el récord de imbatibilidad de Víctor Valdés. Marcan Agüero y Forlán.... dicho así parece que este año, con la misma plantilla que el año pasado, optamos al triplete. Pero la realidad depende de quién te la cuente.
Lo cierto es que en Champions hemos empatado a cero en casa contra un equipo desconocido de Nicosia (la capital de Chipre, para los despistados), vamos, ninguna potencia futbolística. Y ayer, en el Nou Camp, el equipo mejoró el 6-1 de la temporada pasada con un 5-2. La progresión es lenta, pero es progresión. Si el año que viene quedamos 4-3, en dos añitos les ganamos allí por un 3-4. En fin, que hay que hacer chistes para no desesperar.

Roberto
El Atleti, como el año pasado con Coupet, y como el anterior con Pikachu Cuéllar, se enfrentó al Barsa con el portero suplente. Cada vez que llegamos allí nos llevamos un saco de goles. El bueno de Roberto, que ya estuvo en el Atleti y salió para pasarse una temporada calentando banquillo en el Recre antes de que descendiera, ha vuelto al club gracias a la habilidad de Suso García Pitarch que, como viene siendo habitual, lo regaló y lo volvió a comprar por 1,5 millones de euros. Un fenómeno nuestro director deportivo. Un crack de las finanzas, de la economía de mercado, de la compra-venta de jugadores para beneficio de las arcas del club... (mecagohastaensuputamadre).
Decía que el bueno de Roberto no tuvo muchas opciones porque antes de que dejara la toalla en la red ya le habían pegado un zambombazo al larguero, y antes de que se cumpliese el minuto dos, y con los guantes aún por ajustar debido al susto del zurriagazo anterior, ya estaba sacando el balón de dentro de la portería. Así hasta cinco veces en su primer partido oficial de temporada... son demasiados para un portero que debuta. La ilusión que debía de tener y con la que tendría que contagiar a sus compañeros se desvaneció en las mallas.


Porteros

Lo de los porteros del Atleti es un misterio. Este año hemos fichado a dos: Roberto (que ya estuvo en el club, se vendió por medio y se recompró por uno y medio) y Asenjo, un guardameta joven con un año de experiencia en la primera división con el Pucela (seis millones de euros). La pregunta surge cuando te enteras de que el portero titular de las categorías inferiores de la selección nacional ha venido siendo un chico de la cantera, De Gea, y que ha perdido esta titularidad cuando el Valladolid le dio la oportunidad a Asenjo para defender al equipo en la máxima categoría. ¿Por qué no han subido a De Gea al primer equipo? ¿Por qué Abel, que ha sido portero, no le ha dado una oportunidad a De Gea? ¿Hay algún interés en que el del filial no juegue? ¿Alguien pierde su comisión si el chico se convierte en una figura? No lo entiendo, de verdad.

Cantera
Lo de los chavales de la cantera, con Abel el cobarde, sigo sin entenderlo. Contra el Apoel estuvieron durante toda la segunda parte calentando en la banda Rubén Pérez y Keko. Ninguno de los dos salió. Abel sigue quejándose de la falta de plantilla y de que tendrá que tirar de la cantera. Pero está visto que sólo tira de ella para rellenar banquillo, para completar las listas de las convocatorias. Por ahora no ha habido ninguna oportunidad real a los chavales. Me suena todo a Ignacio Camacho. Recuerdo su debut de titular contra el Barsa en el Calderón y el buen partido que hizo. Después fueron racaneándole minutos y más minutos hasta dejarle en otro relleno de banquillo. Quiero pensar que se le cuidaba para la intervención de cadera de la que se está recuperando, pero me temo que me equivocaré.

Lo de ayer
Que el Barsa es un equipazo, no tiene discusión. Que juegan muy bien, de memoria, con mucho toque y una presión espectacular, tampoco es noticia. Ayer nos fulminaron en media hora. Nos metieron tres que pudieron ser cinco (luego lo serían) mientras nosotros, sin ánimo, desmoralizados, y completamente desbordados atrás, creíamos que podíamos plantar cara porque delante nos sobra mucha calidad. Lástima que Maxi no estuviera inspirado, que Forlán no tuviera su mejor día, que Simao se perdiera en el caracoleo y que Agüero no empezase con la intensidad con la que acabó. Jurado, como en los tres partidos anteriores, el más correcto -cuando juega de media punta, insisto, no en la banda-.
Assunçao muy voluntarioso y trabajador, los de atrás, mejor no analizar mucho. Intentaron tirar el fuera de juego sin mucho éxito (nos cayeron cinco), se veían desbordados por las bandas (y eso que Perea y Antonio no estuvieron mal) y Ufa y Pablo en el centro hicieron lo que pudieron. En resumen. Individualmente, nuestros chicos se salvaron, no hicieron un mal partido. Pero el equipo, como tal, en conjunto, no rula, no va, no funciona... y no me pregunten por qué. Quizá Abel tenga las respuestas.

Lo de siempre
En cuanto al propietario y presidente del Club Atlético de Madrid S.A.D. les invito, again, a que se piren. Vendan todas sus acciones a socios, empresas, patrocinadores y entidades públicas para que volvamos a ser un club de fútbol y recuperemos el derecho a opinar y a decidir. Como les diría Lola Flores si ella fuese el Atleti: "Si me queréis, irse".

El miércoles viene el Almería del traidor mexicano. Iremos sin ilusión, sin esperanza, resignados a ver qué hacen los nuestros. Pero ahí estaremos para animar con nuestra presencia.

Vamos, Atleti.

miércoles, 16 de septiembre de 2009

Nicosia, capital de Chipre

 
Atleti 0 - Apoel 0
La capital de Chipre, una isla arrinconada en el Mediterráneo, entre Turquía, Siria y Grecia, es Nicosia. Los chipriotas se independizaron de Gran Bretaña en 1960 y, según el último censo, no llegan en toda la isla a 800.000 habitantes. En Nicosia, la capital, ya lo he dicho, viven 309.500 habitantes. Uno de sus equipos de fútbol (creo que ni siquiera son profesionales) es el Apoel que ayer consiguió empatar en competición oficial (Champions) al Atlético de Madrid en el Calderón.

En la grada había cerca de 2.000 grecochipriotas animando como posesos a su equipo. Son muy malos pero hicieron un papel digno que celebraron como si se tratase de la mayor gesta deportiva conseguida por algún paisano. Todo un espectáculo oírles y verles cantar y bailar. Muy educados, muy alegres, muy coloridos y -me repito- muy malos.
El partido fue una mierda.

La primera parte aún sigo sin entenderla. ¿Por qué pone a Jurado en la banda si durante toda una temporada -en el Atleti- se demostró que ahí no funciona y durante otra temporada completa -en Mallorca- ha demostrado que su sitio es de media punta? ¿No jugó el otro día de media punta contra el Racing y fue el mejor? Pues eso. En la segunda parte Abel lo colocó en su sitio y no es que maravillase el equipo, pero hicieron alguna ocasión.
El Kun estuvo desaparecido y Forlán no tuvo fortuna. Estrelló un balón en la escuadra y subió la cotización del portero chipriota que, no me extrañaría, esté ya en la agenda de Suso para suplir la larga ausencia de Asenjo (paradón ayer en el minuto 7). ¿Por qué coño hemos fichado dos porteros si tenemos al titular de las categorías inferiores de la selección en casa? ¿Es que si juega De Gea alguien no se lo lleva muerto?

¿Por qué Abel se empeña a meter a Sinama en la banda? Ayer jugó hasta de lateral. Lo de "jugó" es mucho decir. El francés cuajó sus mejores temporadas en el Recre cuando jugaba de killer. En el Atleti sólo ha ocupado este puesto el primer partido de la temporada pasada contra el Málaga, cuando ganamos 4-0 y metió dos goles. En fin...
¿Por qué Rubén Pérez y Keko estuvieron calentando toda la segunda parte en la banda? ¿Por qué seguimos pagando un sueldo a Reyes si ni siquiera le convocan porque no está ni para hinchar los balones? ¿Será posible que echemos de menos a Mariano Pernía? En fin... este Atleti me mata.

A ver qué pasa el sábado en Barcelona. Cualquier cosa.