viernes, 13 de abril de 2012

Mi enfermedad

Llevo más de un mes desaparecido del blog. Excusas mil. Especialmente de ubicación. En este tiempo he estado en Costa de Marfil, Marruecos, Bilbao, Burgos, Salamanca y casi en Portugal. Siempre pendiente del Atleti. Por la tele, por los mensajes del móvil, por twitter @santiriesco, por feisbuc y en el Calderón, cuando andaba por la villa y corte coincidiendo con algún día y horario imposible de esos que les ha dado por regalarnos a los de la liga bancaria sin que el dúo prescrito diga esta boca es mía. Me cago en sus muelas.

El miércoles, a las diez de la noche oiga, desafié a la lluvia, al cansancio, al desastre liguero (veníamos de perder con el Levante -domingo a las doce del mediodía-) y no pude resistirme a la argumentación de mi embarazadísima esposa: "¿Y si ganáis?" Buff. No me imagino ganar a los vikingos después de una docena de años y estar viéndolo por la tele en casa. Me corto las venas. Total, que mis hermanos me cosieron a guasás telefónicos y acabé plegándome ante el ofrecimiento de un bocata descomunal de jamón del bueno en pan estupendo con una capita de tomate aliñado con ajo al punto. Todo acompañado por unas patatas fritas de marca, de las buenas, y un donuts de chocolate como colofón. Es que merecía la pena ir sólo por estar con mi familia y por el cenorrio previo al choque. Y para el Calderón que me enfilé.

Pancartas
Como mi abono está encima del Frente Atlético, pues no pude ver hasta el día siguiente las pancartas que fueron sacando los chavales. Pero ví las que había a mi alrededor. La de los dos turcos que siguen a Arda Turan con una sábana donde se lee "Forza Atleti. Arda", la de los que están deseando salir en el "Tomate" futbolístico de "Cuatro": "Manolos, os cambiamos un minuto de tv por nuestras novias" , una genialidad gaditana sostenida por un grupo de cachondos con un trozo del quince: "Uds. tenéis a Cristiano, nosotros una tajá como un piano... pisha". Y la que más hondo me llegó, una sencilla tela blanca con grandes letras en rojo colocada en la curva de las peñas históricas del club: "Mi enfermedad".
Hoy, buceando por la red, he visto el mosaico en el que participé levantando mi cartulina roja (cuando me toca la blanca, ni se me ocurre tocarla). Y he podido leer algunos de los mensajes que los chicos del Frente Atlético fueron sacando a medida que el partido se desarrollaba. De todos ellos, me quedo (y pongo aquí) el que mejor resume la actitud del Real Madrid (y de todos los equipos que han dejado de interesarse por los títulos, el fútbol y los valores tradicionales ligados a este espectáculo).


El cáncer
Sin duda el cáncer del Atleti es la S.A.D. gestionada por dos delincuentes como Gil Marín y Enrique Cerezo. Dos tipos siniestros que han sido condenados por haberse quedado con el club al convertilo en Sociedad Anónima sin poner un chavo. Una condena que no se ejecutó (vamos, que no devolvieron un duro y se quedaron con todo) porque el delito había prescrito (mierda de Justicia. Somos un país del cuarto mundo que nos creemos potencia. Damos pena).
Desde que estos delincuentes y ladrones de guante blanco, balances tuneados, paraísos fiscales y empresas interpuestas robaron el Atleti, nuestra enfermedad, esto se ha convertido en un verdadero cáncer terminal. Por el equipo pasan cientos de jugadores, entrenadores, intermediarios, chupópteros, rapiñeros, representantes, negocietes turbios... y los resultados son lo de menos. De hecho, no hay resultados. Da igual que no ganemos al Real Madrid en el Calderón desde hace 13 años, da igual que no entremos en Champions (este año es posible que ni siquiera alcancemos la Europalí si no eliminamos al Valencia y ganamos la final en Bucarest), no importa que cada temporada desmantelemos el equipo y fichemos ocho o diez futbolistas mediocres que tapan la progresión de los canteranos (igual de mediocres, pero más baratos y de la casa). El caso es trincar comisiones, llevarse la pasta que genera una S.A.D. disfrazada de club de fútbol que se aprovecha de los sentimientos de generaciones y generaciones de rojiblancos a los que nos cuesta acabar de creernos que esto ya no es el Atleti, que esto es sólo un disfraz, una tapadera, un negociete de dos colegas que se están forrando con nuestra enfermedad. Malditos hijos de puta. Tenía que decirlo.

Dicho lo cual. A seguir padeciendo, aunque ganemos, la dictadura de los sinvergüenzas. Y mientras, los atléticos, cruzados de brazos y cantando el "Madridistas, hijos de puta". A ver si nos damos cuenta, pronto y todos, de que los hijos de puta están en el palco, no en Concha Espina.

Otro día insistiré en el asunto de la competición adulterada (el Madrid nos saca ¡40 puntos! y el segundo al tercero ¡28 puntos!).

¿Dónde está mi Atleti?

4 comentarios:

Fuerza Bética dijo...

Hola buenas,soy uno de los administradores de fuerza*bética un blogs sobre información bética que hemos creado entre unos colegas de un antiguo foro,nos gustaría poder hermanarnos con tu blogs y poder compartir enlaces,información y comentar en los partidos que nos toque enfrentarnos.

Me gusta tela tu blogs sobre todo el nombre del mismo jajaja esta muy conseguido,enhorabuena,bueno pues espero una respuesta tuya a nuestra propuesta,te dejo el enlace de nuestro blogs:

http://fuerzabetica.blogspot.com.es/

Jose I. Fernández dijo...

Qué pasa Santi? No he podido evitar soltar una carcajada cuando has dicho lo de "malditos hijos de puta. Tenía que decirlo"...

Lo más triste de todo esto es que ya consiguen que nos resignemos, y que como el derbi del miércoles fue "digno", pese al 1-4, y nuestra afición no hizo tanto el ridículo como el derbi del año pasado, pues encima no me fui muy cabreado para casa.
Para que veas, con un 1-4. Al fin y al cabo, tengo 30 años y en mi vida he visto al Atleti cuatro veces, CUATRO, ganar al Madrid, así que ni sientes ni padeces... (lo peor es que es mentira...).

Pero te pediría que no titules el post "mi enfermedad" y pongas luego un apéndice con la palabra "cáncer", porque algunos nos preocupamos... :(

Que, como bien sabes, hay cosas más importantes que el fútbol.
Así que papi otra vez ¿eh? Como se notan los potentados :)

Un abrazo y a ver si nos vemos pronto

PD: Quita lo de las letras. ¡Que no soy un robot, coño!

Santi Riesco dijo...

Amigo de Fuerza Bética, me gustaría poder dedicar más tiempo a este blog, intercambiar links, que pudiéramos colaborar, que mi equipo volviese a ser de los socios y que no quedásemos los séptimos otra vez para entrar a Europa por la puerta de atrás... también me gustaría que me pagaran más en el trabajo y que me tocara la lotería... pero no dispongo de todo el tiempo que quisiera. Gracias por el ofrecimiento. Si se dan las circunstancias, seguro que colaboramos y estamos en contacto. Hasta podemos tomarnos algo antes de un Betis-Atleti si me pilla por Sevilla o de un Atleti-Betis si venís por Madrid. Pero no puedo comprometerme a algo que sé no voy a poder cumplir.
Un abrazo y suerte para lo que queda (menos contra el Atleti, que andamos caninos de victorias).

Santi Riesco dijo...

Jose I. qué alegría volver a saber de ti. Aprovecho para felicitarte por el cumpleaños (Facebook dixit). En cuanto a lo de la enfermedad, era una pancarta que estaba justo debajo de ti, en la curva. Los que provocan el cáncer, a tu izquierda, en el palco, ya sabes.
Gracias por la felicitación ante la llegada de otro miembro a la familia (el 25 sabremos si es niño o niña). Y nada de potentado, ya sabes que los niños vienen siempre con un pan debajo del brazo. Además, donde comen tres, comen cuatro, qué leches.
Lo de las letras no sé quitarlo. Ni cuenta me había dado. Si me dices como eliminarlo, intento sacar un rato y me lo cepillo.
Ando muy jodido de tiempo últimamente, preparando viajes de trabajo a Brasil (mayo) y Argentina-Paraguay (julio) para estar en casa el resto del año con mi familia sin necesidad de grabar fuera de las fronteras patrias.
A ver si nos vemos (todos los días miro para arriba, pero sigo sin localizar tu abono).
El jueves, si todo va bien, iré a animar con espíritu rumano.
Un abrazo.