lunes, 28 de enero de 2013

Los de rayas siempre ganan

LIGA 2012-13

Athletic 3 - Atleti 0

El primer partido en el Calderón, esta temporada, fue contra el Athletic de Bielsa. El mismo al que le ganamos en Bucarest la final de la Europa League. Y le metimos cuatro. Cuatro pepinos en un encuentro que Javi Martínez y Fernando Llorente vieron desde el banquillo. Ayer, en San Mamés, tampoco jugaron. Uno lo vería (si lo vio) desde Munich (Alemania), el otro estaba "lesionado" con la cabeza en Milán (Italia). Ya sabéis, lo de emigrar para ganarse el sustento también llega al balompié. 
Pero nos metieron tres.Tres goles en la segunda parte. 

La verdad es que a los nuestros, como decía el Cholo en la sala de prensa, no hay mucho que reprocharles. Es verdad que hubo muchos cambios, que no jugó el lesionado Falcao, que dejó a Manquillo en el banquillo, que Emre salió de titular, vamos, que hizo lo que viene haciendo el míster argentino desde que comenzó la temporada, a saber: dar minutos a los menos habituales para reservar a los que sí lo son antes de un compromiso serio. Y este jueves hay que solventar en el Calderón, a las 22:00 una semifinal de la Copa del Rey contra el equipo que nos ganó la última final del trofeo, en el Camp Nou, hace un par de años.  De modo que bien por el Cholo. Además, como bien dice Diego Pablo: "si no perdiéramos ni empatáramos fuera de casa, no seríamos segundos sino primeros". ¡Zas, en toda la boca!

El partido
Había invitado yo a mi suegro, poco amante del fútbol y seguidor del Athletic por la vida entera que vivió junto a la ría, a que viniera a cenar a casa para ver el partido. Quería estrenar un cable mágico que conecta el teléfono y la tableta con la tele para ver el partido de internet pixelado en pantalla gigante. Que era muy tarde, me dijo mi sabio padre político. Que se iba a la cama. Total, que cené con las chicas y cuando todas se fueron a la cama me puse a buscar en los cacharritos el partido. Nada. Imposible. No hubo manera. Cero patatero. Solución: la radio, un poco de imaginación y el cansancio que me pudo antes de empezar la segunda parte. Con empate a cero me dormí.

A las tres menos cinco de la madrugada mi hija mayor escucha que hemos acabado de darle el biberón a su hermana y reclama nuestra atención. Que está mala, me dice. Y la meto en mi cama al tiempo que enciendo la tableta para ver el resultado, el resumen, la rueda de prensa, algunos artículos y un par de crónicas sobre el partido.

Me gustó Courtois, me gustó lo que vi del equipo antes del 1-0. Coincido con el Cholo en que todo es mejorable, pero que no se le puede reprochar nada a los chavales. Para mí, el Athletic hizo un partidazo. Parecía que les iba la vida en ello y que habían vuelto a meter en plantilla al médico de Gurpegui, al del juicio  del pedal adulterado que ahora comienza. Vamos, que corrían como perros. Y claro, cuando un equipo tiene esa intensidad (increíble que la mantuvieran los 90 minutos) lo menos que se merece es ganar. Y si encima no levanta el pie con un 2-0, es lógico que metan un par más. 

A las tres y media de la madrugada volví a apagar el cacharrito y me dio por pensar. "Siempre ganan los de rayas". Les ganamos nosotros en la final de Bucarest vestidos de rojiblancos, les ganamos en la primera vuelta vestidos de rojiblancos y nos ganan ellos en la segunda, vestidos de rojiblancos. 

Pues bueno, pues vale. La Liga para los dos de siempre. Nosotros a las copas, que siempre dan más juego, más posibilidades y más alegría. Aunque no tengan hielos.

Aupa Atleti.

2 comentarios:

Tomi Soprano dijo...

Que moderno se nos ha vuelto usted, Don Santiago. Revienvuelto, compañero.

Santi Riesco dijo...

De tan moderno que lo oí por la radio y me dormí. La paternidad está acabando conmigo, aunque a las tres de la mañana aproveché y me metí en vena todo lo habido y por haber sobre el partido.
Gracias por la bienvenida. A ver si aguanto. Las chicas me están dando muy mala vida...